La prensa, los medios de comunicación constituyen sin duda un Poder. Poder con mayúsculas. Empresas y políticos lo saben bien. De este hecho nace la necesidad de tener clara una política de comunicación, de que alguien se responsabilice de la misma. Esa es la forma más light. Los más duros se dedican a comprar medios (recordemos Telefónica y Antena 3), de establecer simbiosis políticas-empresariales (ya sabéis, el Poder Fáctico Fácilmente Reconocible, que dirían otros), de amedrentar a los medios (en España con demandas, y fuere de ella incluso con violencia), etc...
Pero, sin duda, uno de los mejores medios que conozco para influir en la prensa es la compra de publicidad. Sin duda mucho mejor que comprar un periódico o comprar a un periodista. Es legal, el gasto 100% deducible, con posible repercusión en ingresos, sin tener que hacerse cargo de un negocio que no se entiende ni de las obligaciones propias de de tratar con una fuerte plantilla y un elevado riesgo empresarial. Haced memoria sobre los mayores anunciantes de este país y veréis la suavidad con la que son tratados. Y, si os flaquea la memoria, os traigo un ejemplo bien cercano.
ING, principalmente a través de ING Direct es uno de los anunciantes con mayor gasto de este país. Entre los 10 primeros en general, y el número uno si hablamos de internet. No es un Don Nadie precisamente. Los comerciales de publicidad de los medios saben que, por su modelo de negocio, ha de gastar en publicidad buena parte de lo que se ahorra en otros lares. Suculento cliente.
Ahora observemos esta noticia de Expansión del día 10 de este mes. Nos vamos al último párrafo y ahí podemos leer:
ING, otro de los bancos europeos sin activos tóxicos, desembolsa, por su parte, 100 millones de euros en el gran circo del motor, donde patrocina al equipo Renault de Fernando Alonso.
Curioso, curioso, ya que en Invertia, casi un mes antes, ya se recogia que ING tenia ese tipo de activos vía Lehman.
El banco holandés ING informó hoy de que la quiebra de la entidad estadounidense Lehman Brothers le generará unas pérdidas de alrededor de 100 millones de euros antes de impuestos.
Seguro que es todo casualidad, pero sorprende que un medio como Expansión tenga el valor de decir que ING este libre de activos tóxicos cuando ya se había afirmado que no era así. En todo caso no esta solo. Y es que, ante la crisis que ha llevado a este paciente sano (interesante contradicción, ¿verdad?) a ser dopado con dinero público, la impresión que uno tiene es que la prensa, en general, ha sido muy benévola. Nadie se cuestiona nada. Hacen bien, con un poco de suerte, esa inyección de 10.000 millones de euros de dinero público, les permitirá seguir cobrando sabrosas tarifas publicitarias.
Esta claro que Gettys tenía otras formas de convencer a Kane de que modulase su discurso. No estuvo fino.
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