Era sólo cuestión de tiempo que una compañía se decidiera a implantar chips RFID en el cuerpo de sus empleados. Se trata de CityWatcher.com, una compañía de seguridad que guarda videos de seguridad de diversos entes gubernamentales y la policía de EE.UU.
Según ha comentado Sean Darks, CEO de esta compañía, lo hacen por motivos de seguridad, ya que es un método de control de acceso a una sala donde se almacenan videos. De hecho, en sus declaraciones al Financial Times, le resta importancia al tema de la privacidad diciendo que lo que más de setenta de sus empleados llevan implantado en el brazo derecho no es un GPS, y que mediante esas etiquetas digitales, sus esposas no podrán saber dónde están en todo momento. Este tipo de actuaciones siempre serán polémicas, pero no hay dudas de que determinados trabajos requieren renunciar a la vida privada o incluso a la privacidad, así que seguro que no son los últimos en hacerlo.
Vía | FT.com ($)