El Gobierno de España está estudiando elevar de dos a tres años la duración máxima del subsidio de desempleo, debido a que el número de parados que pueden llegar a dicha situación se va a elevar en los próximos meses. Esta medida sería temporal mientras dure la crisis.
Parece, pues, que el cambio de Gobierno permite quitar los últimos escollos que permitían contener el gasto público, es decir, Solbes, y que a partir de ahora veremos medidas centradas en el gasto como método para salir del atolladero en el que nos encontramos.
A mi personalmente, esta medida me parece un parche y me preocupa. Me parece un parche porque se centra en que la gente desempleada siga teniendo subsidio y no en que la gente desempleada encuentre un trabajo. Y me preocupa porque es una medida que puede costar mucho dinero y aunque no me gusta nada que la gente se quede sin ingresos, ya que esto podría desembocar en pobreza, puede ser contraproducente, ya que cuanto más subsidio, menos esfuerzo hay por buscar trabajo.
Si se quiere ampliar el subsidio de desempleo habría que controlar mejor a quien se le da. ¿A una persona que busca activamente trabajo o a todo el mundo? ¿A una persona que decide “pactar” con su empresa una salida negociada (con un falso despido) y que se va a tirar tres años preparándose una oposición financiada por el Estado o a una persona que con sus ingresos mantiene a toda su familia? ¿Una persona que se toma el paro como unas vacaciones pagadas o a una que se lo toma con un trabajo en sí, el de buscador de empleo?
Si hay que ampliar el subsidio, muy bien, se puede ampliar, pero habría que controlar a quien se da, lo que hace para buscar empleo, dar formación útil para que cambie de sector si es necesario y sobretodo, generar unas condiciones propicias para la creación de empresas y empleo.