No necesitamos un rescate financiero!... No necesitamos un rescate financiero!....No necesitamos un rescate financiero!.. ¿Necesitamos un rescate financiero?
Ahora resulta que todo el mundo sabía que Portugal necesitaba un rescate financiero de la Unión Europea. Todo el mundo lo sabía… menos Portugal. Lo cierto es que aquí lo advertimos hace justo un año, tras la caída de Grecia: Rendida Grecia, Portugal será el próximo objetivo de los especuladores. ¿Especuladores? Porsupuesto que sí, algo que fue puesto en duda, incluso en estas páginas.... Ahora, esos señores especuladores tan arduamente defendidos, no cesarán hasta que caiga la próxima víctima.
Y si lo de Portugal tomó un año completo, fue un tiempo que ayudó a preparar la estrategia de ataque para el próximo país, aquel donde se librará la batalla final por el destino del euro. Una misión que puede tomar dos e incluso tres largos años. Años de larga agonía, como la que ha vivido Portugal en los últimos 12 meses. No precisamente por la incapacidad de las autoridades para revertir una situación que era plenamente gobernable hasta el año 2009. Sino más bien por la rapacidad de los animal spirit, devoradores de todo principio, ley y orden moral.
Si Portugal rechazó las medidas de auxilio en términos más oportunos, era porque su estructura y liquidez financiera le auguraba un manejo sostenible de la crisis. Pero el insaciable apetito de los tenedores de bonos, unido a la desconfianza y la especulación rayana en la indolencia, terminaron una vez más con el triunfo rotundo de los mercados y el fracaso estruendoso de los gobiernos y de la voluntad política ciudadana. El imparable ascenso del costo de la deuda, desde el 3% del año 2008 al 9% de las últimas semanas, imprimió el sello fatídico de una crisis sin retorno. Lo que se está viviendo no tiene marcha atrás y es la caída a un abismo infondable.
Ahora es oficial: Portugal está en bancarrota y el ministro de Finanzas solicitó ayuda a la UE para resolver sus problemas de deuda. 100.000 millones de euros deberá desembolsar el BCE para Portugal, que se convierte así en la tercera ficha del dominó europeo en sucumbir por los problemas financieros tras la caída de Grecia e Irlanda. Y si alguien pensó que los problemas estaban sólo en la periferia, ahora el efecto dominó se acerca al núcleo de la UE. Esto despeja las dudas de hasta qué punto el problema portugués contagiará a la economía española. El problema es que España es demasiado grande para ser rescatado. Y su caída arrastraría a Francia y Alemania.
La quiebra de Portugal era esperada por el mercado desde hace meses, dado el estado agónico de su economía y los fuertes temores al impago de su deuda. El fuerte incremento en el costo de la colocación de deuda lusa superó ayer el 9% a dos meses y precipitó el colapso. Esta quiebra implicará una serie de restricciones para los portugueses, y una drástica aplicación del plan de austeridad. Curiosamente, el plan de austeridad fue el motivo por el cual el primer ministo José Sócrates debió renunciar el pasado 23 de marzo, al ser rechazado por el parlamento. Ahora el plan de austeridad y los recortes presupuestarios se impondrá por ley y no habrá vuelta atrás. Ahora se conocerá cabalmente lo que es vivir en bancarrota, y bajo la esclavitud de la deuda. Y es que la libertad (del mercado) es la esclavitud.
En El Blog Salmón | Portugal, asediado por las agencias de calificación y la banca privada, enfrenta hoy un dia clave, En España se librará la batalla final por el destino del euro