¿Han existido reglas claras en la globalización? Sorpresivamente, Tyler Durden, del sitio Zero Hedge, publicó el fin de semana esta entrevista a John Perkins, autodenominado “sicario económico”. La entrevista fue realizada por Amy Goodman, el año 2005, a raíz de la publicación del segundo libro de Perkins, The Secret History of the American Empire (La historia secreta del imperio americano). Esta primera parte de la entrevista se centra en el primer libro de Perkins, Confessions of an economic hit man (Confesiones de un sicario económico), obra que su autor tardó veinte años en publicar, y que constituye una fascinante obra de no ficción para leer este verano.
En esta primera obra, John Perkins describe como él, egresado con distinciones de la Escuela de Negocios de la Universidad de Boston, fue reclutado a finales de los años 60 por la NSA (National Securities Agency), para timar a países pobres prestándoles más dinero del que podrían pagar, para exigir luego su libra de carne y hacerse cargo de sus economías. La confesión de Perkins aporta una cruda visión sobre la trastienda de la globalización en la cual instituciones como el Banco Mundial y el FMI estuvieron al servicio de las grandes corporaciones que sumergieron a muchos países en la esclavitud de la deuda.
De acuerdo a Perkins, la hegemonía que emprendió Estados Unidos al terminar la segunda guerra mundial, no requirió de acciones militares, sino de operaciones de estos “sicarios” (como él los describe), que llegaban a los países a ofrecer importantes acuerdos comerciales y de infraestructuras (construcción de puertos, carreteras, industrias), que beneficiaban a los Estados Unidos y a un puñado de lugareños. Más aún, el dinero que se gestionaba a través del Banco Mundial no iba directamente al país sino que a las corporaciones estadounidenses, pero la deuda quedaba a cargo de todos los ciudadanos.
El testimonio de Perkins ostenta la ventaja de una panorámica privilegiada en la que explica de manera sencilla el derrotero de la globalización de los últimos 40 años. En el profuso escaneo a que fue sometido para su reclutamieto, Perkins señala que así como le detectaron sus fortalezas comunicativas de liderazgo y gestión económica, también le detectaron sus adicciones: el poder, el dinero y el sexo (¿les recuerda algo el caso DSK?) , por lo que fue un instrumento facilmente corruptible.
Es significativo que Zero Hedge, uno de los principales sitios de economía y finanzas de Estados Unidos, desempolve esta entrevista que ya tiene seis años. Es una muestra de la necesidad por intentar comprender lo que ha estado detrás de muchos procesos que han permanecido ignorados y que resultan necesarios a la hora de buscar explicaciones al actual descalabro económico que vive el mundo. La globalización no ha sido una panacea, y el economista coreano Ha-Joon Chang desglosó hace algunos años los mitos del libre comercio en su obra La patada a la escalera.
En El Blog Salmón | Algunos mitos claves del libre comercio