Willem Frederik Duisenburg 1935-2005. No solo presidió la introducción del euro en 1999 y de las notas y monedas del euro en 2002, pero guió los primeros pasos del Banco Central Europeo. Tenía un documento de constitución del BCE marcando sus pasos y 12 ministros de finanzas siguiendo y criticando cada acción.
Cuando el euro estaba valorado bastante por debajo del dólar sólo se oían críticas, por la debilidad de la moneda (ahora las críticas son porque el euro está demasiado fuerte) y también por la falta de crecimiento en la zona del euro. Querían que Duisenburg resuelva sus problemas bajando los intereses y olvidándose de su obligación de control sobre la inflación. Esto para que los ministros no tengan que tomar las medidas que deberían tomar para cumplir sus obligaciones bajo el Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Además, Duisenberg tenía la mala suerte de que los franceses siempre querían a Jean-Claude Trichet en ese puesto desde el principio e intentaban forzar su dimisión.
¿Veremos estas críticas reflejadas en los comunicados salientes de los ministerios de finanzas europeos o caerán en la hipocresía que siempre emerge cuando alguien se muere?
Vía | BBC Mundo y Europa Press En El Blog Salmón | El BCE bajo más presión que nunca y El Pacto de Estabilidad de goma