España sigue siendo un país de luces y sombras. El porcentaje de personas de entre 25 a 49 años que trabajan a tiempo parcial de forma involuntaria, ya que no encuentran un trabajo a jornada completa, fue en 2023 muy elevado. En concreto, el 59,7% de los hombres y el 48,6% de las mujeres. Estas cifras superan, con creces, la media de los países de la UE, donde el 30,4% de los hombres y el 18,1% de las mujeres ejercen trabajos a jornada parcial por imposibilidad de hacerlo a jornada completa.
Estas conclusiones, y otras explícitas, pueden extraerse de los datos del tercer trimestre de la EPA. Con respecto al mismo trimestre, pero en este caso de 2023, España ha conseguido aumentar en 376.000 personas la tasa de ocupación y que el paro descienda en 140.400 personas (un -4,85%). No obstante, el paro juvenil sigue siendo el segundo más elevado de la UE, con un 26,9%.
Preocupa especialmente el empleo a tiempo parcial, que viene a demostrar la precariedad en el empleo actualmente. De hecho, en el último trimestre ha alcanzado un 12,8%, superando el 12,5% registrado en el mismo periodo de 2023.
Los datos confirman que el 47% de los españoles que trabajan a jornada parcial lo hacen porque no han encontrado un empleo a jornada completa, mientras que el 13,8% lo hace por obligaciones de cuidados familiares. Esta situación casi siempre lleva a acarreada una precariedad, pues el salario resulta insuficiente y no garantiza poder vivir dignamente.
Prácticamente 1 de cada 2 trabajadores a tiempo parcial quieren trabajar más horas, pero no encuentran un trabajo a jornada completa. La segregación ocupacional demuestra que el 73,7% de los trabajadores a tiempo parcial son mujeres.
En España, hay 2.793.900 personas con contrato a tiempo parcial, lo que representan el 12,8% del total de ocupados del país, que se sitúa en 21.823.000. Entre julio y septiembre de 2024, 2.058.200 trabajadoras mantenían una jornada parcial (el 73,6%), lo que se traduce en el 9,43% del total de ocupados en España.
En el caso de los hombres, el 26,4% está a contrato parcial y representa solo un 3,37% del total de 21,8 millones de ocupados que tiene el país.
Razones por las que se triunfa el trabajo a tiempo parcial
Los motivos son muy dispares entre hombres y mujeres. Normalmente suele ir vinculado a la imposibilidad de encontrar un trabajo a jornada completa, pero entran en juego otros factores cómo la conciliación familiar (cuidado de niños o adultos dependientes), mantener una formación o seguir una serie de obligaciones familiares o personales indispensables.
Con datos de 2022 en la mano, el motivo principal, entre las mujeres, fue la imposibilidad de encontrar un empleo a jornada completa (48,4%), seguido del cuidado de niños o adultos enfermos, incapacitados o mayores (17,3%).
Entre los hombres, predomina la imposibilidad de encontrar un empleo a jornada completa (52,1%), seguido de cursos de enseñanza o formación (18,8%).
Se puede dar la circunstancia de que el trabajador escoja el trabajo a tiempo parcial libremente. En España son 261.000 personas, acumulando dos trimestres consecutivos de descensos. De aquí, 59.900 son hombres y 201.100 son mujeres.
La influencia del lugar de residencia
También influye, según la encuesta de la EPA, el tipo de hogar. Los porcentajes se elevan entre las mujeres que trabajan a tiempo parcial en España y en la UE, si están al frente de hogares con hijos. En el caso de España, entre las mujeres, predominan: adulto viviendo en otro tipo de hogar (sin pareja) con hijos, con un 27,4%. Le sigue el caso de adulto viviendo en pareja con hijos (23%).
En el caso de los hombres, la jornada a tiempo parcial predomina entre aquellos hogares formados por un adulto viviendo en otro tipo de hogar (no pareja) con hijos. En la UE es el caso del adulto que vive solo con dos hijos.
Trabajo a tiempo parcial por edades
Trabajar en jornadas parciales implica unas bases de cotización más bajas y unas pensiones a futuro más modestas.
El 46% de las mujeres trabaja a tiempo parcial por no encontrar más horas. El problema comienza en la franja de entre 25 y 29 años, con 102.900 ocupadas parciales. Entre los 45 y los 49 años y entre los 50 y los 54 años, el problema es mayor y suman 269.000 ocupadas a tiempo parcial, ya que no logran un contrato a tiempo completo.
Entre los hombres, los contratos a tiempo parcial predominan entre los jóvenes, es decir, en las franjas de edad de 20 a 24 años y de 25 a 29 años. Ambos grupos suman 134.500 ocupados a tiempo parcial.
El trabajo a tiempo parcial sigue siendo un problema realmente serio para el tejido productivo de España. De no mejorar la situación, tanto por las condiciones de la oferta laboral como por el impacto de la reducción de la jornada laboral, miles de personas comenzarían a entrar en un proceso profundo de pobreza ante la imposibilidad de afrontar sus gastos cotidianos.