- Importe máximo del 15% de la deuda a favor del cliente, con un máximo de 3.000 euros.
- Sin costes financieros para los clientes: Tipos, comisiones, etc...Cero patatero.
- Plazo de hasta 5 años.
- Amortización a vencimiento.
- En caso de que antes del vencimiento se recupere alguna cantidad del procedimiento concursal, se aplicará necesariamente a la cancelación de este préstamo.
- EL ICO distribuirá estos fondos a través de una serie de entidades financieras colaboradoras, que serán las que firmen estos préstamos con los clientes.
Inesperadamente, el Gobierno se está encontrando con una negativa de las Entidades financieras a colaborar en este programa del ICO. A día de hoy sólo han firmado el convenio correspondiente siete entidades, y ninguna de ellas es de las denominadas grandes en cuanto a red comercial y volúmen. No acaban de llegar instrucciones a las oficinas bancarias de como tramitarlos y, según rumores, algunas Entidades se están arrepintiendo de su colaboración. ¿Por qué todo ésto?
- Seguramente las comisiones que pague el ICO a las entidades por colaborar son miserables.
- Los importes son muy pequeños, lo que hace que esa falta de rentabilidad se agrave.
- ¿Les garantiza el ICO el cobro de los préstamos?
- Se hace muy difícil captar y vincular nuevos clientes con este producto, a diferencia de con otras actuaciones del ICO.
- Muchos de los beneficiarios de la línea serán ex clientes que abandonaron las entidades financieras en beneficio de las Empresas filatélicas. ¿Dulce venganza?
- Muchos afectados, instigados por los Ex-administradores, han acusado a la Banca de estar detrás de la intervención gubernamental.
Está claro que, tanto en cuanto a imagen como en cuanto a eficiencia, es fundamental que se adhieran nuevos Bancos y Cajas. Es de suponer que, en breve, el Gobierno, de un modo u otro, se lo hará saber.