En su debut, y apadrinada por sus poderosos accionistas, La Sexta apostó muy fuerte para llevarse el Mundial de Fútbol del pasado año, lo que le permitió arrastrar bastante audiencia. Repìtió estrategia con el Mundial de Baloncesto, donde además el buen papel de nuestra selección le permitió sacar pecho de forma ostensible. Más adelante, se hizo con los derechos de emisión en abierto de la liga. Y este año, merced a la surrealista guerra del fútbol, está viendo como Mediapro le cede cada semana varios partidos de fútbol para retransmitir en abierto. Y encima ahora llega el Eurobasket... Creo que, de base, es un error estratégico que una cadena generalista pretenda dar una cobertura completa de un evento deportivo como es el Mundial o un Eurobasket. Creo que una cadena generalista no puede hipotecar su programación durante dos o tres semanas para tratar en exclusiva un evento, interrumpiendo así la dinámica de programación estable que es la que consigue formar una base de audiencia fiel.
Pero es que además una cadena generalista no puede pretender, a través de un único canal, emitir en exclusiva todos los eventos a la vez. Porque tiene que recurrir o a la emisión en diferido de gran parte del mismo, o a soluciones absurdas como al retransmisión en paralelo (dividiendo la pantalla o alternando fuentes) que impiden el correcto seguimiento de ningún evento.
Sucedió ayer cuando coincidieron en el tiempo el debut de la selección española en el Eurobasket y la previa de la Champions entre AEK y Sevilla. Al final no se pudo ver en condiciones ni una cosa ni la otra.
Ah, pues emitamos por internet... pero si después de anunciar a bombo y platillo esta posibilidad resulta que no funciona... doble frustración para los usuarios.
Personalmente creo que La Sexta está gestionando la abundancia de forma poco eficaz, y donde había una buena oportunidad está generándose problemas de cara al futuro.