En concreto, la OCDE prevé que la economía española crezca un 3,2 % este año y un 2,7 % el próximo, frente al 3,3 % y el 3 % que pronostica el Gobierno. Este escenario es muy parecido al mostrado por la Comisión Europea. Ya en 2017 la estimación de la OCDE es de un crecimiento del 2,5 %, frente al 2,9 % previsto por Moncloa.
En lo que respecta al paro, la OCDE sostiene que España no bajará de la barrera del 20 % hasta mediados del próximo año. En concreto, la tasa de paro será del 22,1 % este año, del 19,8 % en 2016 y del 18,2 % en 2017.
Curiosamente la OCDE sí apuesta porque España cumpla su objetivo de déficit del 4,2 % pactado con Bruselas para este año. Sin embargo, en 2016 habría una pequeña desviación, de sólo una décima, que dejaría el déficit final en el 2,9 % del PIB.
Por último, en lo que se refiere a la evolución de la deuda pública, la OCDE estima que España acabará este año con un endeudamiento del 100,5 % y que el año próximo se reducirá muy tímidamente hasta el 100,3 %. Ya en 2015 el ratio de deuda pública sobre PIB sería del 99,2 %.
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