Últimamente con la crisis se le está dando demasiadas vueltas a demasiadas estadísticas. Es cierto que las estadísticas nos dan datos muy buenos que nos permiten a todos (consumidores, trabajadores, empresas, estudiantes, políticos, etc) tomar decisiones. No obstante las estadísticas no son completamente fiables del todo.
Esto vienen a la noticia que recientemente he leído en Cotizalia que más de medio millón de jóvenes no estudian ni trabajan ni buscan activamente empleo, lo que hace que la EPA no los pueda calificar de parados. Que vagos son los jóvenes que no hacen nada y viven del cuento.
El tema es que en España tenemos dos factores que pueden estar influyendo mucho en este tema. Por un lado tenemos la alta economía sumergida que hay en España ¿Considera la EPA a los jóvenes que trabajan cobrando en negro?
Además no me extrañaría que también se incluya a aquellos que están opositando. Algunos lectores no tienen una buena imagen de los funcionarios y de los opositores, pero una persona que se prepara una oposición suele estudiar un buen número de horas diarias, no creo que sea completamente inactiva.
Recientemente comentaron en GurusBlog la diferencia entre los datos de paro de la EPA y los datos de paro del INEM. Ambos tienen unas metodologías distintas, por lo que es normal que no coincidan. En la EPA se pregunta a la gente (que es más probable que estén en casa si están parados) y el INEM tiene un registro al que percepción de la gente no merece la pena acudir si no es para apuntarse a un curso o para cobrar el subsidio de desempleo. Una cifra probablemente sobrevalora el paro y la otra lo infravalora.
Cuando veamos las estadísticas, no hace falta que pensemos que se están cocinando oscuramente con el objetivo de obtener un resultado u otro, las diferentes metodologías dan diferentes resultados. Más me importan las tendencias que las cifras.
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