Esta semana ha vuelto a ser noticia la dación en pago, debido a la iniciativa legislativa popular que ha llegado al Congreso con millón y medio de firmas. Si bien es difícil controlar la veracidad de todas las firmas, lo que está claro es que hay un sentimiento en la sociedad de que la dación en pago es algo justo.
Si una hipoteca se ejecuta, el embargo de la vivienda debería saldar la deuda. La idea es simple y potente. Por supuesto tiene implicaciones financieras importantes, pero estoy bastante a favor de la medida. Voy a explicar por qué y los matices, que siempre son importantes.
Comienzo nuevo
Una de las ventajas de la dación en pago es que permite a la gente que ha tenido problemas económicos graves empezar una nueva vida sin cargas a la espalda. En otros países, aunque no haya dación en pago, las personas pueden acogerse a la figura de concurso de acreedores, saldar parte de sus deudas con sus bienes y empezar de nuevo sin cargas (en España existe la figura pero es lento y complicado).
Esto permitiría que la gente que ha tomado malas decisiones pierda todo lo que poseen, pero no en el futuro. Impide que esa gente busque ingresos en negro para que no les quiten parte. Y permite también a muchos empresarios empezar de nuevo, sin cargas que impidan lograr financiación en el futuro.
Por eso pienso que es justa la dación en pago. El banco se queda con la garantía y esta vale menos que la deuda entonces es culpa del banco por evaluar mal el riesgo. Y no olvidemos que la persona que se hipotecó no sale indemne. Lo ha perdido todo. Ha sufrido. No hay riesgo moral.
Habrá menos créditos
Una consecuencia clara de la dación en pago es que habrá menos créditos. Es lógico. Los bancos corren más riesgos a la hora de conceder créditos, ya que en caso de impago se quedan con el bien independientemente de su valor. Una cosa no viene si la otra, si hay dación en pago habrá gente que nunca tendrá una hipoteca.
Por tanto debemos asumir que en un escenario en el que la legislación española contemple la dación en pago habrá menos crédito hipotecario, aunque será de mayor calidad (en principio). Y eso puede ser muy malo para mucha gente. Pero creo que es necesario.
Cuando llegue la recuperación económica no podemos volver al modelo de siempre, y una forma de que los bancos limiten sus riesgos, una vez se olviden de lo que les pasó, es que la legislación les haga asumir más riesgos.
¿Retroactividad? No más dinero público a los bancos, gracias
Dentro de la ILP sobre la dación en pago se pide que la medida sea retroactiva. ¿Mi opinión? Que es una locura. Es cambiar la legislación a mitad de la partida. Y haría quebrar a nuestro ya maltrecho sistema financiero. La gente devolvería sus viviendas porque la inversión fue ruinosa.
Una cosa es que a partir de ahora exista dación en pago y otra muy distinta que las hipotecas firmadas en la década pasada pasen a ser de dación en pago ahora mismo. Los bancos perderían tanto dinero que habría que inyectarles dinero público (más aún) o hacer que los ahorradores pierdan parte de sus ahorros como consecuencia de las quiebras. Y penalizar a los ahorradores por las malas decisiones de los no ahorradores me parece una barbaridad, de un riesgo moral impresionante.
Conclusiones
No me parece nada mal la dación en pago. Podríamos implementarla en la legislación española sin problemas. Es más, estoy a favor. Pero hay que asumir que esto se traduciría en menos hipotecas (en épocas de bonanza, ahora mismo apenas hay) y que no puede ser retroactiva.
En El Blog Salmón | El Congreso debatirá la Iniciativa Legislativa Popular sobre la dación en pago ¿qué cambios se piden?, ¿Cuántas hipotecas se pueden favorecer de la Iniciativa Legislativa Popular de dación en pago? Imagen | Alfonso Benayas