Como ya comentamos en su momento, el programa, que se prolongará durante quince meses, incluye una ayuda económica de 426 euros mensuales durante un máximo de seis meses. Podrán acceder a ella los parados de larga duración que hayan agotado todas las prestaciones, tengan cargas familiares y cumplan determinados requisitos.
Con un mercado laboral como el español en horas bajas, la implementación de medidas de este tipo con cargo al erario público está más que justificada. Sin embargo, lo que deberíamos plantearnos es si verdaderamente este tipo de ayudas son eficaces y cumplen su principal razón de ser: sacar a desempleados de la lista del paro y proporcionarles un empleo. De no ser así, estaríamos tirando el dinero.
Las estadísticas comunitarias en este sentido no incitan al optimismo. Quizás nuestro país peque de sobreprotección a los parados y tal vez la búsqueda de empleo se vea desincentivada con este tipo de ayudas, si bien es cierto que 426 euros mensuales no dan para mucho hoy en día.
Sólo el tiempo dirá si esta medida es o no un éxito. Lo que está claro es que los beneficiarios de la misma, que rondan entre 400.000 y 450.000 personas, recibirán un soplo de aire fresco en sus maltrechas cuentas corrientes. A corto plazo les vendrá genial, de eso no nos cabe duda.
En El Blog Salmón | La nueva ayuda a los parados, algunas dudas y Sr Rajoy, quizás su crisis haya finalizado pero la nuestra aún no es historia
Imagen | No man´s land