Bernard “Bernie” Madoff ha fallecido este miércoles 14 de abril en prisión a los 82 años. Madoff montó el mayor esquema Ponzi de toda la historia. Además probablemente la estafa piramidal que más años ha durado. Su caso ha inspirado películas y afectó a inversores de todo el mundo. Su firma Bernard L Madoff Securities fue fundada en 1960 y operó hasta que fue arrestado, en diciembre de 2008.
Aunque se conoce el caso de Carlo Ponzi, al que se le debe el nombre de estos esquemas piramidales, y fueron inventados por Baldomera Larra que sepamos, el caso de Madoff es especial. Es especial porque, como veremos, Madoff estaba tan entremetido en el sistema financiero que era difícil pensar que alguien tan dentro en el sistema financiero estuviera gestionando una estafa piramidal que robara a la élite neoyorquina, y mundial.
Bernie, de orígenes humiles a la élite de las finanzas
Bernie nació en una familia judía, su padre era fontanero y bróker. Era el segundo de tres hermanos, Sondra y su hermano menor Peter Madoff (volveremos sobre Peter). Después de ir al instituto, estuvo un año en la Universidad de Alabama y se trasladó a la universidad Hofsfra donde se graduó en ciencias políticas. Después fue un año a la Escuela de Derecho de Brooklyn, pero no llegó a obtener el postgrado de derecho. Lo dejó para fundar su propia empresa, la Bernard L Madoff Investment Securities LLC en la que trabajó hasta su detención.
Su empresa empezó con 5.000 dólares que Madoff había ahorrado trabajando como socorrista e instalador de aspersores. Al principio trataba con “penny stocks”, es decir, acciones de bajo valor que se anunciaban en las “pink sheets” (hojas rosas). Si hemos visto la película el El Lobo de Wall Street, recordaremos que era como se hizo rico Jordan Belfort como ya contamos aquí. Su suegro, Saul Alpern, era contable y le recomendó a sus clientes.
Madoff a su vez fue el pionero por lo que se conoce Payment Per Order Flow, es decir, cobrar a los “market makers” por enviarles las órdenes de sus clientes. Esta práctica es legal, y es mediante el modo que los brokers sin comisiones como Robinhood (protagonista por el reciente caso de las acciones de GAME) se han visto beneficiados.
Madoff era un miembro activo de la National Association of Securities Delaers (NASD), la actual FINRA. Esta es una entidad mediante la cual la industria se autorregula, participando no sólo en estándares que sus miembros se obligan a mantener, sino también en arbitraje. Madoff estuvo en su consejo y fue elegido presidente del consejo de administración de esta asociación.
La familia Madoff estuvo en posiciones destacadas en organismos regulatorios. Madoff estuvo en el consejo de administración en la Securities Industry Association, la precursora de SIFMA, la Securities Industry and Financial Markets Association. La SIFMA premió a él y su hijo Andrew por su extraordinario liderazgo y servicio en 2008. Su hermano Peter estuvo dos periodos en el consejo de Administración de la SIFMA (se puede visitar su perfil en Linkedin). Shana Madoff, sobrina de Bernie e hija de Peter, era miembro del comité ejecutivo de regulación y cumplimiento. Shana se casó en 2007 con Eric Swanson, que entre 1996 y 2006 trabajó en la SEC, donde llegó a ser director ayudante de la oficina de inspecciones de cumplimiento, liderando un equipo de entre 8 y 18 personas. Durante unos años fue directivo de BATS Global Markets, la tercera bolsa de EEUU.
Esto hizo que Madoff estuviera en la cumbre de las finanzas de EEUU. Estuvo en el consejo de administración de la International Securities Clearing Corporation, subsidiaria en Londres de la DTCC, la empresa que es el principal proveedor de servicios de liquidación y custodia de valores de EEUU, y quizás el más importante del mundo. También fue presidente del consejo de Administración de NASDAQ, la bolsa en la que cotizan actualmente la mayor parte de las grandes empresas tecnológicas.
Todos los miembros de la familia cesaron sus posiciones cuando se descubrió el escándalo y afirman no saber nada, a pesar de ello, Peter fue condenado a diez años de prisión. Shana Madoff aunque investigada fue declarada no culpable y Eric Swanson se determinó que nunca había participado en la investigación de la firma de Madoff durante su relación con Shana.
La familia Madoff además contribuía generosamente en el aspecto regulatorio y político. Los hermanos habían contribuido con 56.000 dólares a SIFMA entre 2000 y 2008. Bernie y Ruth Madoff contribuyeron entre 1991 y 2008 con 240.000 dólares a las campañas de diversos cargos federales. Varios de estos políticos devolvieron el dinero recibido o lo donaron a varias causas.
Las veces que no pillaron a Madoff
Según las declaraciones del propio Madoff, su esquema piramidal llevaba funcionando desde 1991, aunque se cree que pudo empezar en 1987 o en 1960, con la fundación de su emoresa empresa. En 1992 se investigó a Aveline & Bienes, la empresa sucesora de la firma de su suegro que le consiguió los primeros clientes. No obstante, este caso nunca llegó a investigar al propio Madoff.
Entre 1998 y 2008 Harry Markopolos, un analista financiero recopiló pruebas sobre el fraude que estaba ejecutando Bernard Madoff. La historia de Markopolos y Madoff podría dar para una película. Después de conocer que uno de sus clientes trabajaba con un Hedge Fund que tenía beneficios consistentes de entre un 1 y 2% mensual, intentó replicar su estrategia tras obtener documentos de la firma de Madoff. La conclusión a la que llegó es que era matemáticamente imposible que los beneficios de Madoff siguieran una curva perfecta de 45 grados. Para él, incluso en los mejores momentos del mercado, este es demasiado volátil. Markopolos llegó a una conclusión, o Madoff operaba con información confidencial u operaba un sistema Ponzi. En algún momento Markopolos afirmó que para que las operaciones de Madoff fueran ciertas, tendría que estar operando con más opciones de las que la Chicago Board of Trade (un mercado de derivados) tenía disponibles. Esto debería haber alertado, al igual que alertó cuando se estimó que Ponzi estaba cambiando más cupones de respuesta postal de los que había en circulación.
Con ayuda de analista cuantitativos, demostró que no había correlación entre los beneficios de Madoff y el rendimiento del S&P100, presentando una queja formal ante la SEC, que no le hizo mucho caso. El Wall Street Journal incluso llegó a describir a Markopolos como un poco loco después de que se descubriera, como en el Mito de Cassandra, nadie creyó a Markopolos. Tras la detención de Madoff, Markopolos publicó un libro en 2010 titulado “Nadie quería Escuchar”.
Tampoco descubrió nada el Banco Central de Irlanda en 2003, cuando Madoff al pasar a usar fondos irlandeses, tuvo que proporcionar mucha información a esta entidad. Este mismo año, Madoff fue investigado por la SEC, Bernie se temió lo peor, pero aun así los investigadores nunca hicieron las preguntas correctas, y según sus palabras se comportaban como “Colombo”. Según el propio Madoff:
Yo estaba asombrado. Nunca miraron mis registros de acciones. Si los investigadores hubieran comprobado con la DTCC, un depositario central de valores, hubiera sido fácil para ellos verlo. Si buscas un sistema Ponzi, es lo primero que haces.
Tampoco a nadie le extrañó el alto volumen que gestionaba Madoff con su Hedge Fund y que sólo tuviera tres empleados y un contable.
Se descubre el pastel
En el momento de su arresto los Madoff tenían un ático en una de las mejores zonas de Nueva York valorado en unos siete millones de dólares, una casa de unos cuatro millones en la exclusiva zona de los Hamptons (cerca de su zona de veraneo), otra casa de verano en Florida y otra en la Costa Azul. La familia también tenía dos yates y un jet privado, su patrimonio era de alrededor de 650 millones de dólares.
Los hijos de Madoff, Andrew y Mark, trabajaron en el negocio de su padre, pero en la parte legítima y no fueron encontrados culpables. De hecho fueron Andrew y Mark los que denunciaron a su padre. El 9 de diciembre Bernie Madoff le confesó la verdad a su hermano Peter y le dijo a Mark que iba a pagar un variable de 173 millones de dólares a los empleados, Mark se lo diría a Andrew. Ambos hijos cuestionaron a su padre como podía pagar dicho variable cuando había problemas para devolver a los clientes su dinero. En ese momento Bernard confesó la verdad a su mujer e hijos, el dinero de sus clientes lo depositaba en una cuenta en el JP Morgan Chase, y cuando sus clientes querían recoger sus beneficios, desde esta misma cuenta les pagaba. Pidió a los hijos unos días para arreglar unos asuntos. Sus hijos no esperaron, nada más salir contactaron con un abogado y no volvieron a hablar con su padre. El 11 de diciembre Madoff sería arrestado.
La mecánica de la estafa salió a la luz. El Hedge Fund de Madoff tenía dos empleados que se dedicaban a falsear las cuentas tomando las acciones que habían tenido mejores resultados y ocupaba una planta en un rascacielos de Nueva York. En las plantas de abajo Bernard L Madoff Securities LLC tenía sus oficinas. Bernie utilizaba su involucración con las asociaciones judías de Nueva York para atraer a clientes adinerados de origen judío. También gestionó el dinero (y estafó) a fundaciones de origen judío, como la de Steven Spielberg (el director de cine) o la del premio Nobel y superviviente del holocausto Elie Wiesel. Pero no sólo a judíos estafó Madoff. Banco Santander tuvo que restituír a sus clientes de banca privada 2.300 millones, Pedro Almodóvar, Kevin Bacon, Rosalía Mera, Juan Abelló y hasta los Mets de NY fueron sus víctimas. Su relación con el cine no acabaria aquí, Bernie fue interpretado por Robert de Niro en la película que hicieron sobre él, y Ruth por Michelle Pfeiffer.
La cantidad defraudada por Bernie es tan grande que se desconoce exactamente, dado que lo que conocemos son estimaciones según el método de cálculo. Se cree que debía entre 57 y 65 mil millones de dólares. Alrededor de la mitad de los clientes de Madoff incluso recuperaron más dinero del que invirtieron, antes de que todo cayera. Se subastaron los bienes de la familia Madoff, incluyendo las joyas y la ropa de diseñador sin usar, en un hotel lujoso en Nueva York.
La desgracia se ceba con la familia Madoff
De ser la estrella de la aristocracia de Nueva York, Ruth Madoff pasó a ser a una viuda discreta y temerosa. Ruth se casó con Bernard Madoff a los 18, y se mantuvo fiel hasta el final. Su hermano Peter y ella fueron los que pusieron los diez millones de fianza para liberarlo mientras que se celebraba el juicio. Ruth era conocida por su estilo de vida, haciendo compras caras en parís, no sólo de moda, sino también de muebles y antigüedades. Aunque era conocida, era discreta. A Ruth le dejarán al final “sólo” dos millones de dólares. Cualquier gasto que hace de más de 80 euros tiene que justificar su origen.
En su autobiografía contaría que su marido le fue infiel durante varios años. También ella y Bernie intentaron suicidarse, pero aunque ingirieron muchas píldoras se levantaron al día siguiente. Cuando se descubrió el fraude, ella y su marido comenzaron a recibir muchas cartas y llamadas, llenas de insultos y amenazas que le hicieron temer por su vida. Desde ese momento intentó pasar lo más desapercibida que ha podido. Hizo bien, durante el juicio su marido testificó con un chaleco antibalas.
Lo último que se sabe es que ha cambiado su vida completamente. Durante un tiempo vivió en un apartamento de alquiler en Conneticut de 60 metros cuadrados por el que pagaba 2.500 dólares y pasó a conducir un coche normal. Esta caída de la alta sociedad inspiró a Woody Allen en su película Blue Jasmine. Le han hecho fotos haciendo tareas cotidianas, como sacar la basura o hacer la compra en el supermercado. Después se mudó a una casa valorada en unos tres millones de dólares, pero no era de su propiedad, sino de su nuera y su nuevo marido. Porque, la mayor desgracia para Ruth seguramente sería la pérdida de sus dos hijos.
Mark Madoff, el hijo menor se ahorcó a los 46 años en 2020, en su apartamento en el Soho neoyorkino, en el segundo aniversario del fallecimiento de su padre. Andrew Madoff falleció el 3 de septiembre de 2014, de un cáncer que se le había descubierto en 2003 y que aunque pareció superado volvió en 2011.
Madoff se declaró culpable y fue condenado a 150 años de prisión y a no poder trabajar en el sector financiero de por vida. A pesar de intentos de su abogado, incluso usando la pandemia actual como argumento, Madoff no salió de prisión hasta que falleció esta semana. Su hermano Peter fue condenado a diez años que ha cumplido y está libre ahora. Al contrario que a Carlo Ponzi, no hay constancia de que nadie fuera a visitarlo en la cárcel para entregarle dinero y que lo invirtiera. Supongo que de eso nos tenemos que alegrar, que cien años después habíamos aprendido algo.
Pregunta a los lectores ¿creen que podría haber otro Madoff en este momento operando con tanta legitimidad?
En El Blog Salmón | Carlo Ponzi, el vividor que engañó a EEUU, ¿Cómo montar tu chiringuito financiero? y ¿Cómo se hizo rico el lobo de Wall Street?
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