Las previsiones de Forbes sitúan a Lady Gaga a la altura de los grandes artistas ya consolidados como Bon Jovi o U2, que se mueven en horquillas superiores de ingresos tal y como nos comentó Onésimo hace unos días. No obstante, existe una gran diferencia respecto estos grandes artistas que se apoya en el marketing de Lady Gaga frente la trayectoria consolidada y demostrada de artistas de antaño. A nivel musical, Lady Gaga es un mero producto de marketing, bien elaborado, cocinado y provocativo que gusta, que tiene temas pegadizos y que mueve los pies de la gente en las salas de baile. Por contra, un concierto de U2 o de Bon Jovi, es un concierto de culto musical, con una trayectoria y audiencia más que consolidada que se pueden permitir el lujo de emitir en directo a través de Youtube un concierto gratuito.
Las cifras de Lady Gaga son cifras efímeras que serán desbancadas por el siguiente producto de marketing musical más provocador y llamativo que se fabrique, pero dificilmente se mantendrá muchos años en este top ten de artistas con éxito. Hagan sus apuestas sobre el futuro, pero hoy por hoy, es una de las grandes haciendo caja con la música.
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