Lógicamente señala que no está hablando de la inversión a través de fondos o vehículos similares, herramientas que ya utilizan. No. Habla expresamente del asesoramiento en la adquisición y explotación de obras concretas (cuadros, esculturas, etc). Afirma que puede ser un mercado interesante, pero que les está costando formar un equipo ad hoc. Y quita importancia al desprestigio que para el desarrollo de dicho mercado haya supuesto el crack filatélico. Dice, y en cierto modo dice bien, que son universos distintos, masivo este, elitista aquel (mínimo para entrar 6.000 euros). Pues yo no lo veo tan claro. * El mercado de obras de arte es un mercado oscuro dónde los haya. Creo que es imposible gestionar una obra de arte tal y como se gestiona un activo financiero. Comercializarlo bajo el paraguas de una entidad financiera puede dar lugar a equívocos. Que un cliente tenga mucho dinero no significa necesariamente que sea un avezado inversor y puede sentirse engañado, incluso cuando no lo ha sido. * Sobre las expectativas de rentabilidad del mismo dice que pueden ser interesantes. Me hace dudar de su apreciación el que apuesten también por el de las energías renovables. Creo haber dejado claro, en mi opinión, quien gana en estos sectores. Su criterio, por tanto, me ofrece muchas dudas. Por cierto, Solaria, fabricante de paneles solares, ha sido colocada en Bolsa por el Santander. La misma entidad atrae inversores que invierten en plantas que, seguramente, compran paneles a Solaria. Si lo trasladamos al mundo del arte, suena mal. Rentable para el Banco seguro que es. * Efectivamente el mundo de la filatelia y el del arte son distintos. Pero es curioso leer determinadas noticias. Afinsa también tenía una división dedicada al negocio del Arte. Y parece que algunos expertos financieros, especialmente vinculados al Santander, estimaron que Afinsa era un buen socio de viaje en el lanzamiento de un fondo de inversión del sector. ¿Se imagina alguien la gravedad que puede suponer un error semejante en un Banco del tamaño del Santander?
Mi conclusión es que el arte puede ser una buena inversión, pero no lo veo como un motor de negocio para un Banco. Si i consejo sirve de algo, adquiere obras que te gusten. Tendrás una rentabilidad estética, la más importante, y con suerte y a largo plazo, una financiera.
Foto por Samuel Negredo