En una entrevista concedida a la Organización Europea de Consumidores ha asegurado que a la Comisión no le gusta la evolución que tienen las tarifas de SMS, los mensajes cortos. Y es que los precios, asegura, no están bajando lo suficientemente rápido. Y amenaza con un nuevo tarifazo, similar al que impuso con las tarifas de itinerancia y que tan buenos resultados está dando, ya que muchos operadores han fijado sus nuevas tarifas por debajo de lo que establece la nueva reglamentación, es decir, había una situación de poca competencia y la entrada del regulador con unas tarifas máximas ha hecho que se pongan las pilas.
Con los SMS pasa algo parecido. Es un negocio muy rentable para los operadores, ya que a pesar de que los costes son mínimos (apenas ocupa tiempo del canal radio y la infraestructura de red no tiene problemas con este tipo de tráfico) las tarifas que cobran son claramente monstruosas. Por ejemplo, en España casi todos los operadores cobran 15 céntimos más IVA por mensaje. Cada mensaje puede tener como máximo 160 bytes. Luego el precio por MB es de 983,04 euros más IVA. En Japón, por ejemplo, el SMS no se llegó a imponer nunca debido a que usan directamente el correo electrónico desde el móvil, con un coste de pocos céntimos por correo al cambio (se cobra por la longitud, por los bytes que se envíen).
En definitiva, que los operadores tendrán que empezar a competir en este tema, de lo contrario les podrían volver a obligar a cambiar sus tarifas. Lo que está claro es que más tarde o más temprano los SMS serán más baratos.
Vía | El País