En National Geographic encontramos un artículo en el que cuentan como han educado a una niña china, desde los dos a los dieciséis años. Desde pequeña ha recibido clases de inglés, piano y se ha preparado en un ambiente muy competitivo. Compitiendo desde pequeña para entrar en una escuela que la prepare bien para la ecuación secundaria y esta que la prepare bien para los cursos preuniversitarios, dónde competirá por una plaza en una universidad china. En caso de que no lo consiga, sus padres están dispuestos a vender una propiedad para que su hija vaya a estudiar al extranjero.
Habitualmente se suele decir que el sistema educativo chino tiene muchas deficiencias. Parece ser un sistema rígido que estimula muy poco la creatividad. No lo conozco lo suficiente para juzgarlo, pero creo que está claro que una minoría se está formando muy bien. Pero estamos hablando de China, y una minoría son millones de personas.
Es interesante la comparación con muchos adolescentes de hoy en día, que no son capaces de expresarse correctamente en su idioma, no digamos ya en el inglés. La competencia les va a venir fuerte.
Además con la fama que están tomando la generación de los ochenta y el bajo nivel en los resultados del informe pisa la competencia va a aparecer fuerte. A la hora de establecer un centro de diseño y desarrollo ¿dónde es mejor en Shangai o en Madrid? Porque de la respuesta de esta pregunta depende bastante el futuro del país. Esto no es un aviso catastrofista, simplemente que es un buen momento para ponerse las pilas y mejorar lo presente.
Vía | National Geographic
Imagen | afeld