Como hemos hablado en estas páginas, el economista de la Universidad de Princeton, Paul Krugman, ha ganado el El Premio de Ciencias Económicas del Banco de Suecia en memoria de Alfred Nobel 2008, conocido como el Premio Nobel de Economía.
En medio de todo el jaléo económico y financiero en que estamos metidos, el Comité Nobel ha elegido un tema que no ha salido a la prensa desde hace tiempo. Este tema sólo suele salir cuando fracasan o se reanudan las negociaciones de comercio internacional, la Ronda Doha, o cuando se habla de que se necesita más proteccionismo.
En este entorno donde vemos dificultades de crecimiento y aumentos en el desempleo, seguro que veremos cada vez más llamadas de protección y de limitación del libre comercio. Ahora que parece que casi todos (aunque no todos) piensan que hay que limitar los mercados financieros, es un salto muy pequeño, ir a las limitaciones del comercio internacional.
En estos momentos, se está oyendo a muchos comparar las dificultades actuales con lo que se vio en la gran depresión del 1929. Lo hacen porque las bajadas en las bolsas han sido los más grandes que muchos han visto, por lo menos los muchos con poca memoria histórica.
Si vamos a aprender de esa experiencia, sería aconsejable entender qué pasó. El problema real de la gran depresión no era las grandes bajadas en las bolsas. El problema real fue que dos políticos estadounidenses, el Representante W.C. Hawley y el Senador Reed Smoot acordaror e impulsaron una ley que se llamó el Smoot-Hawley Tariff Act.
Esta ley tenía el objetivo de aumentar los impuestos arancelarios hasta niveles estratosféricos sobre 20.000 productos importados a Estados Unidos. Esta ley causó represalias de otros países y frenó el comercio internacional llevándo al mundo a la gran depresión.
Con las dificultades financieras, el freno actualen la actividad económica y con el por ahora fracasado Ronda Doha, no sorprenderá oír voces en contra del libre mercado. Si reaccionamos mal, sería otro paso más hacia nuestro propio gran depresión.
Espero que la credibilidad que este Nobel da al comercio internacional sea el respaldo que seguro que necesitaremos en los próximos meses.
En El Blog Salmón | Paul Krugman, Nobel de Economía y El libre comercio vale la pena Más información | Wikipedia sobre Smoot-Hawley