Por paradójico que resulte, ya se puede leer el borrador de las conclusiones de la cumbre de jefes de Estado o de Gobierno que la UE celebra mañana y pasado en Bruselas (¡ni siquiera ha empezado la cumbre y ya tenemos las conclusiones!). Y dichas conclusiones reflejan un cambio de rumbo en cuanto a la crisis se refiere. Ya se ha acabado la época del gasto, ahora viene la del saneamiento de las finanzas.
En dichas conclusiones se deja claro que el gasto ha sido necesario para contener los efectos perversos de la crisis, pero también que hay que volver a la senda de la contención porque los déficits se han disparado. También se rumorea que esto de sanear las cuentas tiene más que ver con subir los impuestos que con contener el gasto, como hemos visto que ha sucedido en España.
Yo espero sinceramente que efectivamente el gasto realizado haya sido suficiente para encaminar la economía a la recuperación, y que ni una subida de impuestos ni una bajada del gasto para sanear las cuentas nos lleven otra vez al abismo. En la crisis de 1929, que fue más dura que esta en cuanto a creación de pobreza, EEUU hizo unos gastos muy fuertes para sacar la economía de la crisis. Y en 1937, cuando parecía que la economía despegaba, se intentó sanear las finanzas públicas. Y se entró de nuevo en recesión en 1938. Se volvió a salir definitivamente de la crisis con el inmenso gasto que se realizó en la Segunda Guerra Mundial.
Espero que la UE esté en lo correcto y ya sea el momento de retirar gasto y sanear las cuentas. Esperemos que el sector privado esté ya en condiciones de crear empleo y rodar solo. De lo contrario todavía nos queda mucho que sufrir en esta crisis.
Vía | El Economista
Más información | Paul Krugman (en inglés)
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