Para ir poniendo las cosas claras, Meyer ni el resto de políticos que tengan participaciones ahí, participan en principio de la SICAV gestora que gestiona el fondo, dado que cualquier fondo de pensiones se divide por una parte en la fórmula jurídica del fondo (en este caso ONG porque Luxemburgo así lo permite) y por otro lado la gestora, que puede ser una SICAV, una sociedad anónima normal u otro tipo de fórmula jurídica en función del estado miembro en el que opere. Meyer, en particular, es una víctima política de su propia retórica.
La retórica de las SICAVs, cuchillo de doble filo
Izquierda Unida en particular y bastante más otros políticos y partidos, han emprendido una cruzada contra las SICAVs como las herramientas que han causado todos los males y como los instrumentos de inversión para los ricos. En todo el discurso, siempre se ha recurrido a la tributación del 1% y se ha obviado intencionadamente que en el caso de desinversión, se tributa en el IRPF por los beneficios.
Que se quiera maximizar el rendimiento en la gestión de los planes de pensiones privados, es de una lógica aplastante y si esta vía se consigue gestionando las inversiones con instrumentos patrimoniales de baja tributación, perfecto. Tanto Meyer como el resto de políticos, ya tributarán en su país de destino por estos rescates cuando los hagan y pagarán los impuestos correspondientes.
Ahora, tener que dimitir porque la gestora sea una SICAV, es una prueba directa del mal hacer en el discurso político, puesto que la gestión de los mercados financieros no es solo la gestión de las pensiones, sino en todos los campos de actuación desde el momento que ponemos un solo euro en manos de terceros y le exigimos una rentabilidad o desde el punto y hora que firmamos un préstamo personal.
La gestión de los ahorros, fondos de inversión y otros productos financieros
Supongo que todos los que piden la cabeza de Meyer y el resto de políticos, no tendrán un solo euro en un depósito retribuido, no tendrán una sola acción de una entidad financiera, no tendrán un solo euro en ningún tipo de fondo de inversión, no tendrán una tarjeta de crédito en la cartera y no cobrarán un solo euro en concepto de intereses por su dinero.
Expongo esto, porque cualquier depósito, fondo de inversión, vías de crédito disponible e infinidad de productos financieros de los que tenemos disponibles en nuestro país, puede participar de SICAVs españolas o extranjeras, porque los intereses que recibimos que superan al IPC no tienen su origen completamente en la contrapartida de intereses que se cobran por los préstamos, porque cada entidad, tiene sistemas de coberturas dentro de los mercados de divisas, opera en futuros y tiene CDS para cubrir riesgos o sencillamente, ganar dinero o perder dinero con ellos.
Es probable que todos estos que critican estén al margen del sistema financiero y allá ellos y su dinero, pero abusar de la retórica para hacer política, es lo que tiene, que te tienes que comer tus palabras con patatas como te descuides, porque tú mismo, estás dentro de ese círculo que criticas y a la vez te favoreces. Y esto es extensible tanto a Meyer que ha cogido las de Villadiego como los mismos que lo critican dentro de su partido o desde fuera.
Otro discurso independiente es la necesidad o no de destinar este formato de ahorro para pensiones en el sector político, pero ese debate, es otro que va más allá y que no tiene nada que ver realmente con este debate. Van a caer muchas víctimas de su propia retórica el día que les de por mirar y leerse los papeles de los contratos de sus productos financieros.
En El Blog Salmón | ¿Qué es una SICAV o sociedad de inversión de capital variable?