En concreto, el 39 % de los panelistas entrevistados creen que la economía ha mejorado en el cuarto trimestre (frente al 62 % del trimestre anterior) y aumenta en casi 17 puntos los que consideran que ha ido a peor. A seis meses vista la tendencia de pesimismo se mantiene entre los panelistas y sólo el 59 % de los mismos (frente al 80 % anterior) opinan que las cosas mejorarán.
Estamos, por tanto, ante un jarro de agua fría sobre la economía española, que no despierta entre los profesionales entrevistados por PwC el mismo halo de optimismo que entre nuestros gobernantes. La incertidumbre sobre una posible recaída de la economía europea se muestra como la principal causa de esta caída en las expectativas de crecimiento.
Alejandro ya lo advertía esta misma mañana: se acercan nubarrones y nos pueden pasar factura. La tormenta que arrecia, en un contexto económico con más de 4,5 millones de desempleados (y sin grandes previsiones de mejora), puede ser de consecuencias nefastas.
En El Blog Salmón | ¿Creceremos más de lo previsto? y Sin soluciones ante el paro estructural en España