La lacra del desempleo sigue castigando sin piedad a la Unión Europea y va camino de volatilizar las economías de sus países miembros. Según los datos publicados hoy por la oficina de estadísticas europeas, Eurostat, la tasa de paro de la zona euro se ha incrementado una décima durante el mes de mayo, hasta el 11,1% de la población, lo que supone un récord histórico desde que se comenzó a elaborar la serie histórica en 1995.
El número de parados en el conjunto de países de la eurozona se incrementó en 88.000 nuevos parados con respecto al mes anterior, con lo que ya son 15.561.000 personas las que demandan un puesto de trabajo en la zona de la moneda única y no lo encuentran debido a la terrible situación económico que atravesamos.
A la cabeza de la lista, como era de esperar, España, con un incremento del 0,3%, lo que sitúa la tasa de paro de nuestro país en un escalofriante 24,6% de la población activa. Nos siguen en la lista el resto de países rescatados: Grecia (21.9%), Portugal (15,2%) e Irlanda (14,6%). A nivel europeo, cabe destacar también la elevadísima tasa de paro entre los menores de 25 años, que se sitúa en el 22,6%.
Analizando estos datos, la conclusión es sencilla: la UE en general, y España en particular, continúan con una serie de tasas de desempleo históricas difícilmente sostenibles por la estructura de sus países. Si no apostamos por políticas activas de empleo que, sobre todo, den una oportunidad a nuestros jóvenes, estamos condenados a una profunda recesión. Como he señalado en mil ocasiones, un país con sus ciudadanos parados es un país con un futuro muy oscuro. No nos merecemos gobiernos que arrojen la toalla contra el desempleo.
Más información | Eurostat (en inglés)
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