Creo que no hemos hablado hasta ahora de Eduardo Barreiros, lo cual la verdad es que es una falta imperdonable. Entre otros motivos porque Eduardo Barreiros fue una especie de Henry Ford español que contra viento y marea convirtió su obsesión por los motores en una industria rentable que daba trabajo a miles de personas.
El documental me parece muy interesante, muestra todas las adversidades contra las que tuvo que luchar Eduardo Barreiros. La falta de medios, las malas condiciones de la época, la falta de financiación y el proteccionismo. A pesar de haber conseguido un contrato para exportar camiones le fue imposible importar piezas que necesitaba y tuvo que buscar en desguaces.
Otro apunte que me gustaría señalar es como muestran que a veces un empresario puede ser muy bueno en un ámbito pero malo en otros. Cuando Barreiros tuvo que dejar su empresa, tuvo que estar alejado del sector durante cinco años por contrato. Se lanzó a otras aventuras empresariales en La Mancha, pero estoy seguro de que no tuvieron tanto éxito ni de lejos como sus motores.
También es una buena lección la que muestra sobre la importancia de elegir bien a los socios, Eduardo Barreiros no lo hizo bien. También uno se pregunta si tuvo un exceso de ambición y si tal vez se debería de haber quedado en los camiones y tractores y no haber saltado a los coches de consumo. O haberlo hecho de un modo más modesto.
Por último un cuarto apunte, la primera noticia que tuve de Barreiros fue una entrevista en radio a una mujer (creo que su hija) que comentaba como su padre al final de su vida había dicho que sólo quedarían unos pocos grupos automovilísticos en el mundo en unos años. Viendo la concentración y fusiones que estamos viendo últimamente, creo que no queda duda sobre la visión de futuro que tenía Eduardo Barreiros.
Así que si este fin de semana tienen algo de tiempo libre y buscan inspiración, este documental me parece un buen modo de pasar el tiempo. Al menos mejor que el de muchos otros.
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