La noticia saltó hace unos días: Telefónica será la primera gran empresa española en probar la jornada laboral de cuatro días. Es un programa piloto que está contemplado en el próximo convenio colectivo pero ha sido tomado como un paso más en la jornada laboral de cuatro días que se impulsa desde algunos ámbitos, como desde el partido Más País.
Sin embargo, al mirar los detalles, no es oro todo lo que reluce. La reducción de horas implica también una reducción salarial y aunque puede ser atractivo para algunos trabajadores, lo cierto es que esto encaja en el plan de Telefónica de reducir sus costes.
La jornada laboral de cuatro días en Telefónica
En principio la jornada laboral de cuatro días en Telefónica es un experimento. Durará seis meses y será completamente voluntario. Se podrá acoger hasta un 10% de la plantilla y por supuesto conllevará una reducción de salario.
Esta reducción de salario no será del 20%, debido a que implicará dos cosas más: la primera, que los trabajadores trabajarán media hora más el resto de días, para compensar parte de las horas que se dejan de trabajar. Por tanto, la reducción de horas será del 14,6%. La reducción de sueldo no será tal ya que la empresa bonificará un 20%.
Por tanto, lo que vemos aquí es que por un lado el trabajador logra una jornada de 4 días, reduciendo las horas casi un 15%, y la empresa logra un ahorro de sueldos. ¿Estamos ante algo que se podría generalizar en otras empresas?
Los costes de las prejubilaciones
Telefónica tiene una larga tradición de EREs y prejubilaciones. Estos ERE tienen muy buena fama interna, ya que muchos de los trabajadores afectados se han ido de la empresa cobrando hasta el 70% del sueldo hasta los 61 años. Luego se reduce para fomentar que el trabajador se acoja a la jubilación anticipada.
Estos EREs pueden parecer un gran gasto para Telefónica, pero a la vez logran reducir costes laborales. Telefónica es una empresa que tiene un gran número de empleados, ya que su estructura cuando era pública era mastodóntica, y llevan décadas reduciendo y renovado la plantilla por gente más joven a base de EREs.
Por tanto cualquier novedad que Telefónica ponga encima de la mesa en el ámbito laboral tiene que ser mirada con lupa, pues seguramente estemos ante una estrategia novedosa en la reducción de costes. Y en este caso es así: Telefónica se ahorraría mucho dinero si tuviera una buena parte de su plantilla en jornada de 4 días.
También es normal que experimente para ver si el impacto en el día a día es significativo, pero seguro que es mucho menor que mandar a la gente a su casa cobrando el 70% del sueldo sin hacer nada.
¿Aplica esto a todas las empresas?
El problema es que lo que es un caso particular de Telefónica, que siempre está buscando reducir sus costes laborales de alguna forma, puede no ser aplicable a otras empresas, que normalmente andan escasas de personal.
Lo que puede sonar como un pistoletazo de salida del próximo movimiento laboral quizá solo sea aplicable a un tipo determinado de empresas, con exceso de personal. Moderemos, por tanto, nuestro entusiasmo.