En Observando la econosfera han hecho recientemente un par de análisis interesantes sobre cómo afecta el clima a sendos sectores de actividad muy específicos, en concreto el de las estaciones de esquí (que este año han tenido un invierno muy poco favorable para sus intereses) y el de los servicios técnicos de instalaciones de calefacción.
Lo cierto es que algunos negocios y sectores de actividad están directa e indefectiblemente afectados por el clima. La agricultura, el turismo, productos y servicios relacionados con el clima (calefacción, aire acondicionado), energía (producción solar, producción eólica, producción hidráulica)... En todos ellos, se intenta paliar la influencia caprichosa del clima de la mejor manera posible - se protejen los campos con invernaderos, se instalan sistemas de regadío para no depender de la abundancia o escasez de agua, se realizan acciones comerciales y de promoción para reducir la estacionalidad (p.j. vender aires acondicionados en invierno con descuento, o rellenar hoteles en invierno con jubilados a precios baratos), se diversifican las opciones de ocio para no depender del "sol y playa"... Sin embargo, todo esto son medidas que intentan minimizar las veleidades del clima dentro de unos márgenes razonables de variabilidad. Pero con todo lo que estamos oyendo del cambio climático, esos márgenes razonables se van a abrir mucho más en un periodo de tiempo quizás no demasiado lejano. Entonces, quizás esas medidas sean del todo insuficientes para proteger a algunos sectores y obliguen a fuertes reconversiones que afecten a zonas enteras. ¿Alguien se imagina que pasa si en una zona dedicada al turismo de playa las playas se reducen a la mitad por la subida de las aguas? ¿O si determinadas especies vegetales dejan de poder cultivarse debido a un cambio de clima? ¿O si el clima se vuelve tan cálido en una zona que dejan de tener sentido los sistemas de calefacción?
No sé, quizás esté exagerando la nota, pero sin duda un cambio brusco de las condiciones climáticas de una zona pueden tener efectos muy importantes a nivel microeconómico y social, además del medioambiental o del macroeconómico. Es cierto que habrá quien consiga ver esos cambios como oportunidades y pueda aprovecharse. Pero si esos cambios se van a producir en un periodo de 20-50 años y pueden tener ese impacto social... alguien debería ir pensando en qué se va a hacer al respecto.