Las cifras de la Seguridad Social son preocupantes. Está claro, tenemos problemas, y los problemas son ahora mismo, no dentro de x años. Cierto es que el problema es básicamente el paro, que han desaparecido cotizantes del sistema, y que de momento no tiene nada que ver la demografía, pero ya se tienen que tomar decisiones.
De momento las cifras de 2010 son preocupantes. Aunque se tuvo un superávit de algo más de 2.000 millones de euros, hay que tener en cuenta que las cotizaciones de los parados (pagados por el Estado y a base de emitir deuda pública) han sido más de 10.000 millones de euros. Y por primera vez desde que hay datos las cotizaciones de las personas que tienen trabajo no son capaces de cubrir las pensiones contributivas.
Todavía hay más datos preocupantes, el superávit que hemos tenido es íntegramente por los intereses que ha generado el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, cuyo 88% está invertido en deuda pública española. Es decir, financiados con más deuda pues el Estado está en déficit.
Tenemos un problema inmediato con la Seguridad Social, que es básicamente que tiene que trabajar más gente para mantener el sistema. Otra solución sería cambiar el sistema de financiación a puramente impuestos, sin tener dos cajas separadas. Es un paso que habrá que dar algún día cuando el baby boom pase a jubilarse, pero dar el paso ahora mismo, con déficit público, no solucionaría mucho las cosas.
La otra opción sería pasar de un sistema de reparto a uno de capitalización, o mixto, pero también trae problemas. Durante un tiempo habría que financiar a la gente que no haya tenido sistema de capitalización y haya pagado al de reparto, y eso tendría que financiarse con más déficit. Además hay voces que hablan de que un sistema de capitalización sería perjudicial para la mayoría de los trabajadores.
En definitiva, lo único que se puede hacer por el momento es hacer reformas que contengan el gasto y esperar que el empleo se recupere.
Vía | El País
En El Blog Salmón | El superávit de la seguridad social está a punto de acabarse
Imagen | Bruno Unna