Existen multitud de etiquetas para catalogar a un trader en función de la tipología de trading que lleva a cabo en su operativa habitual, pero sin lugar a dudas, los grandes grupos de trading que engloban al resto son dos: el scalping y el swing trading.
¿Qué diferencia un trading del otro? Fundamentalmente, la duración de las operaciones. Mientras el scalping consiste en tomar operaciones a muy corto plazo, siempre ejecutadas dentro de un mismo día (de ahí surge el concepto de Day Trader, o trader intradía), el swing trading es un tipo de trading mucho más tranquilo cuyas operaciones tienen un mayor recorrido temporal.
El intradía está de moda
El trading como tal se asocia habitualmente a la operativa intradía: abrir y cerrar operaciones siempre dentro de un marco diario. La idea es muy clara: uno se acuesta por la noche sin posiciones abiertas en el mercado, ya que la tipología de operaciones que se toman y los riesgos asociados a las mismas requieren la presencia delante de la pantalla durante toda el transcurso de la operación.
Pero el intradía no exige necesariamente que la operativa sea de scalping. No es suficiente que una operación se abra y cierre dentro de un mismo día para considerarla como scalping. De hecho, la barrera entre scalping y swing en intradía es a menudo difusa.
Es muy evidente que las operaciones de minutos son operaciones de scalping. Sí, has oído bien, hay operaciones en las que la entrada y la salida de la misma difieren en apenas unos minutos, y hasta incluso pueden ser de segundos.
El scalping en su esencia, como puedes imaginar, es un trading muy agresivo, en el que se operan gráficos temporales muy pequeños (o directamente gráficos de ticks), y por lo tanto la presencia de ruido es notable. Eso hace que sea una de las modalidades de trading más estresantes y complejas de dominar. Exige lo máximo del trader en todos los sentidos: preparación, concentración, ejecución…
Por eso, rara vez un scalper puro pueda alargar más allá de dos horas una sesión de trading. No sólo porque mentalmente sea un trading agotador, pues requiere de un estudio vela a vela de lo que va haciendo el mercado, sino porque la tasa de fallos va en aumento a medida que se acumulan las horas de pantalla, y en el scalping los fallos suelen pagarse muy caros por los elevados apalancamientos con los que se opera para obtener rentabilidades interesantes en tan estrechos plazos.
El swing trading
Como decía anteriormente, no existe una barrera clara entre scalping y swing cuando se trabaja en intradía. Os puedo decir que en mi primer cambio de scalper a swing trader, mis operaciones pasaron a ser de apenas 1 minuto, a operaciones de 10-15 minutos. ¿Es eso swing trading? Para mí desde luego que lo era, pues multipliqué por 15 la duración de mis operaciones. Pero para los swing traders de operaciones con una duración media de 5-6 horas les parecía un scalping de lo más atrevido.
Lo que es evidente es que el swing trading es una operativa mucho más relajada y sin unas exigencias tan extremas para el operador. Se buscan recorridos largos del precio, y para ello se le deja mucho más plazo temporal al mismo. Eso implica, a su vez, que para obtener rentabilidades similares al scalping los apalancamientos (y por lo tanto los riesgos) asumidos no deban ser tan elevados, cosa que atenúa mucho la tensión emocional de las operaciones.
Después, y siguiendo con el swing trading, más allá del intradía, está el trading overnight, que consiste, como la propia palabra indica, en dejar abiertas posiciones de un día para otro. Esta es probablemente la operativa que la mayoría de la gente tiene en la cabeza cuando habla del genérico “invertir en bolsa”. Y aunque también sea trading, está mucho más enfocada a una mentalidad inversora a medio-largo plazo.
En cualquier caso, y para terminar, hay que ser consciente que existen muchas maneras de hacer trading, y cada cual debe ser capaz de encontrar la que mejor se adapta a sus circunstancias. Incluso hay traders que combinan las diversas modalidades, llevando a cabo sesiones de scalping para tomar operaciones y pasándose al swing trading cuando se trata de dejar correr parte de las posiciones abiertas con filosofía scalping si aprecian que el recorrido a favor puede alargarse en el tiempo.