En un reciente estudio elaborado por unos académicos, incluyendo un miembro del Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra, el órgano que fija sus niveles de interés, nos explica que la salud es más importante que la economía en la felicidad de los europeos y lo satisfechos que se sienten con sus vidas se basa más en su salud.
En concreto, evalúan la relación inversa entre los niveles de hipertensión y de presión arterial y los niveles de felicidad, medidas en 16 países europeos. Esta relación es más importante que el vínculo entre la felicidad de los europeos y el estado de su economía.
El análisis me pareció muy interesante (aquí está para el que le interese) y no muy sorprendente.
Vía | Finfacts (en inglés) Más información | Estudio, en inglés y en formato pdf