La industria discográfica ha estado protestando desde hace tiempo por la pérdida de ingresos que sufren a causa de las nuevas tecnologías. El gráfico nos demuestra su progresiva reducción en la facturación de su producto principal, el CD, aunque estén vendiendo más unidades.
Durante varios años, dieron la espalda a las nuevas tecnologías y se contentaron con amenazar y denunciar a los que osaron aprovecharse de las herramientas que la Web ofrecía.
Algunas de sus maniobras legales tuvieron éxito, y grande, aunque no muchas y, continuaron viendo su negocio imigrar al mundo interactivo.
Con el tiempo, se dieron cuenta que podían hacer negocio con ventas a través del Internet, aunque, en general, siguen pensando en las formas tradicionales de presentar su música, es decir, ellos hacen la selección y venden un producto entero, más o menos, empaquetado.
Hace tiempo, preguntaba en estas páginas, cuántas veces tenía que comprar una canción, ya que las discográficas nos cobraban repetidas veces cuando encontraban una tecnología diferente para vendernos. De los discos a los cassettes a los CDs a los DVDs.
Ahora que la tecnología es interactiva y más difícil de controlar, se molestan.
Los que mejor lo tienen son los que están bien situados con los políticos, ya que, así, pueden conseguir un canon digital y cobrarnos a todos, robemos o no.
Vía | Economist
En El Blog Salmón | ¿Cuántas veces hay que pagar por una canción?