Por 65 millones de euros se ha cerrado la operación por la que el grupo, presidido por Chen Yansheng, ha adquirido los paquetes accionariales de Daniel Sánchez Llibre y de Ramón Condal, los que hasta ahora eran los principales socios. Esta compañía se dedica a un sector que nada tiene que ver con el fútbol, tan siquiera con el deporte, pues se dedica a la producción de juguetes electrónicos y videojuegos.
Aunque el equipo no ha querido dar más detalles de la operación, lo cierto es que esta compra puede suponer un cambio total de rumbo a su gestión. Ya puede verse en el Valencia, cuyo dueño es el empresario de Singapur Peter Lim y es quien se está encargando de la política de fichajes de forma directa, lo que ha generado un enorme malestar en la afición.
De momento, lo único que se sabe es que esta empresa es un gigante en China, pues emplea a más de 10.000 personas y su valor en bolsa es de 3.000 millones de euros, cifra que se vuelve aún más grande frente a los 24 millones de capital social que tiene el Espanyol.
España, objeto de deseo
Pero esta operación va más allá del fútbol, pues en los últimos años España se ha convertido en el objeto de deseo de las grandes fortunas asiáticas, que ven en el país toda una joya inversora, sobre todo por cómo han quedado los precios después de la devastadora crisis.
Un ejemplo de ello es precisamente el magnate que tiene el 20% del Atlético de Madrid, un gran conocido dentro de los círculos empresariales de la capital y por la prensa de todo el país. Se trata de Wang Jianlin, el presidente del Grupo Wanda, uno de los hombres más ricos de China y dueño del Edificio España.
Precisamente, la compra de este edificio ha traído polémica, ya que se realizó cuando el PP todavía gobernaba la ciudad, pero con la entrada de Ahora Madrid al Ayuntamiento las condiciones parecen haber cambiado y la rehabilitación que el chino quiere llevar a cabo para convertirlo en apartamentos de lujo puede irse al traste.
Pero es que además este empresario es parte de la operación Campamento, con la que se levantará un complejo de ocio, centros comerciales y viviendas, y de donde Jianlin también sacará tajada de ello.
Y es que estos multimillonarios procedentes de Asia no solo quieren seguir haciendo fortuna invirtiendo en España, también quieren visibilidad y notoriedad, de ahí que quieran hacerse con equipos de fútbol, ya que eso les pone en órbita en el resto de Europa, es decir, es su puerta de entrada. Vamos, que el que diga que en los palcos de los estadios no se hacen negocios no puede estar más equivocado.