¿Y quién no ha escuchado alguna vez aquello de "me han subido el sueldo pero ahora cobro menos, que mierda"? Bien, pues esto es falso (como siempre puede haber alguna pequeña excepción que comento al final y que confirma la regla). Cuando suben el sueldo bruto, sube el sueldo neto. Y decir lo contrario implica desconocer profundamente el sistema impositivo español.
¿Cómo funcionan los impuestos actualmente en España? Bien, existen unos tramos, pero no funcionan como mucha gente piensa. Esos tramos actualmente dicen que dependiendo de la situación personal hay un primer tramo al 0%. Si eres soltero, trabajador por cuenta ajena y sin descendencia, ese tramo es de 9.050 euros brutos anuales (a esto hay que descontarle lo que se paga a la seguridad social, ya que por esta parte no se pagan impuestos). Luego hasta los 17.360 euros se paga el 24%. Hasta los 32.360 euros el 28%. Hasta los 52.360 el 37%. Y el resto al 43%.
¿Quiere decir esto que el trabajador que cobra 9.050 euros no paga impuestos y el que cobra 9.051 paga el 24% de su sueldo? Con razón la gente no querría que le subieran el sueldo. Pero esto no es así. El trabajador que cobre 9.051 euros pagará 0 euros de impuestos por los primeros 9.050 euros que cobra, y el 24% por el euro extra. Es decir, sus impuestos pagados serán 0,24 euros (o lo que es lo mismo, un 0,0027%).
Veamos un ejemplo más. Un trabajador en la misma situación personal que el anterior cobra (una vez descontamos los pagos a la SS) 30.000 euros brutos. ¿Cuánto pagará de impuestos? Por los primeros 9.050 nada. Por lo que va de 9.050 hasta 17.360 (es decir, por 8.310 euros) se paga el 24% de impuestos (1.994,16 euros). Por lo que queda hasta los 30.000 (12.640 euros) se paga el 28% (3.539,2 euros). Total, se pagan de impuestos 5.533,36 euros (un 18,44%).
Pero muchos lectores seguirán pensando: me da igual lo que diga este blog, a mi una vez me subieron el sueldo y cobré menos. Aquí es donde entran en juego las retenciones. Una persona que cobre 30.000 euros brutos al año (después de SS) y tenga las ya mencionadas condiciones familiares y laborales debe pagar 5.533,36 euros a Hacienda. Y su empresa le retiene lo que le dice Hacienda para aproximarse lo máximo posible a esa cantidad. Pero la retención de la nómina es en puntos enteros. En el ejemplo anterior su empresa probablemente le retendría un 18%, y por tanto a lo largo del año pagaría en retenciones 30.000 x 0.18 = 5.400 euros. Cobraría al mes (en 12 pagas) 30.000-5.400/12 = 2050 euros netos. En la siguiente declaración de la renta, si no tiene ninguna deducción tendría que pagar 133,36 euros (5.533,36 - 5.400).
Ahora a la misma persona le suben el sueldo 250 euros al año. Una mierda, cierto, pero menos da una piedra. Repitamos los cálculos. Pagará de impuestos 70 euros más al año (250 euros extra al 28%). Ahora tendría que pagar 5.603,36 euros a Hacienda, o lo que es lo mismo, el 18,52% (5.603,36/30.250). Pero ahora su empresa le retiene el 19% (30.250 x 0.19= 5.747,5 euros) ya que las tablas de Hacienda así lo indican. ¿Cuánto cobra al mes? Pues en 12 pagas, como antes, 30.250-5.747,5/12 = 2041,88 euros. ¡Menos que antes! Pero cuando al año siguiente haga la declaración de la renta, obtendrá una devolución de 5.747,5 - 5.603,36 = 144,14 euros mientras que el año pasado pagó 133,36 euros. Si distribuimos el pago a Hacienda de un año y la devolución del siguiente en las mensualidades tenemos que el primer año realmente cobró de forma neta 2.038,89 euros al mes y el segundo año 2.053,89 euros al mes.
Es decir, ¡una subida de sueldo bruta siempre conlleva una subida neta! Pero algunas veces, para ver dicha subida hay que esperar a hacer la declaración del año siguiente. Si comparas las declaraciones y la situación familiar y personal es la misma se puede ver este efecto, ya que en ella se especifica lo que se ha cobrado neto en total. Precisamente la declaración de la renta está para compensar las irregularidades fruto de que las retenciones vayan a tramos, aparte de para aplicar deducciones e introducir otros ingresos obtenidos en el periodo fiscal.
¿Cuál es la posible excepción que he comentado antes? Pues simplemente que las personas que cobren menos de 22.000 euros al año no están obligadas a declarar, aunque la declaración salga positiva. Alrededor de los 17.360 euros podría haber algún caso de que un trabajador sólo vería la subida neta declarando, pero en ambos años sería positiva (el primer año pagaría mucho y el segundo algo menos). Como no vamos a pagar puede darse la situación de que el segundo año se cobre menos que el primero (pero no estoy seguro de que se pueda encontrar este caso, habría que hilar muy fino y no creo que sea algo representativo; al contrario, Hacienda "te perdona la vida", hace que te favorezcas de los tramos de las retenciones debido a que es más costoso recaudar que lo que se recauda).
Una última aclaración. Lo del porcentaje de la retención lo he simplificado bastante, ya que el porcentaje que retienen las empresas es sobre el sueldo bruto sin pagar a la SS. Yo, por simplificar, he excluido los pagos a la SS, pero el razonamiento es el mismo.
Espero que el artículo os haya parecido interesante. Puede que haya algún número mal, pero lo que pretendo es que los conceptos queden claros. Aún así si veis algo raro no dudéis en ponerlo en los comentarios.