El INE acaba de publicar los datos del PIB del segundo trimestre del año, que anuncian malas y buenas noticias a la vez. Por un lado tenemos el lado negativo, que el PIB en el último año se ha contraído un 4,1%, una cifra muy alta. Seguimos en clara recesión.
Sin embargo el ritmo de decrecimiento se ralentiza. En el segundo trimestre del año el PIB cayó un 1%, frente al 1,9% del trimestre anterior. Es cierto que sigue siendo un ritmo bastante acusado, recordemos que Francia y Alemania han estado en positivo en dicho trimestre, pero desde luego es un ritmo mucho menos acusado que en el anterior trimestre.
Lo que está claro es que todavía nos queda para salir de la recesión. Seguimos mal, produciendo menos y destruyendo empleo (a pesar de repuntes temporales por motivo del turismo). Otros países parece que salen adelante mejor por su dependencia en sectores más productivos que la construcción, que es en lo que hasta ahora se ha basado nuestra economía. Esperemos que sepamos hacer otra cosa que poner ladrillos, por nuestro bien.
Vía | INE (pdf)