Justo con la aprobación de la reforma fiscal para enviarla al Parlamento, el Ejecutivo se ha sacado de la manga un procedimiento de amnistía tributaria para los ingresos no declarados en el IRPF que se podrán regularizar de manera voluntaria y sin sanciones durante el próximo año. Para evitar perjuicios con los sancionados hasta ahora, la AEAT devolverá los importes exigidos y cobrados por estas sanciones. Esta es la segunda amnistía que se saca el Gobierno de la manga y ésta además, con un claro tinte electoralista que deja en desventaja a todos aquellos que sí cumplieron con la ley del IRPF correctamente.
Galicia, las peticiones de Feijoó y el color político
La inmigración gallega ha sido históricamente y lo es hoy día una de las más importantes de España, hasta el punto que el mayor número de afectados por la regularización de pensiones recibidas del extranjero se encuentra en Galicia con una previsión de unos 250.000 contribuyentes afectados sobre un total de 800.000.
El pasado mes de abril, Alberto Núñez Feijoo realizó una petición apoyada por todo el parlamento gallego al Gobierno central para que eliminara la sanciones por no haber declarado estas pensiones. Giro importante el que ha dado Montoro sobre el asunto, que pasó de negar la mayor y decir que se iba a sancionar a todo el mundo a cocinar una amnistía en toda regla para todos estos contribuyentes del IRPF.
La única explicación lógica y coherente para este cambio de chip en el ministerio de Hacienda está en la alineación con los astros electorales, el feudo que supone el PP y los palos que se han llevado en Galicia después del desastre de las preferentes en las cajas gallegas con la guinda de las revisiones en las pensiones.
Como siempre, pierde el ciudadano cumplidor
De todos los afectados por el asunto de las pensiones, me cuesta horrores creerme que nadie sabía que las pensiones que se declaran en el extranjero y que no tributan en origen, tienen que tributar en el país de destino. Es más, muchos gallegos retornados desde Suiza han estado declarando puntualmente las pensiones que han cobrado del país helvético, a pesar de no existir siquiera el convenio de intercambio de información en el momento que ellos llegaron a España.
Estos son realmente los perjudicados en esta amnistía, aquellos que han cumplido con su obligación y han declarado sus pensiones no detectadas en principio por Hacienda y esos son los que ahora ven cómo ser cumplidores sólo les sirve para que sus vecinos defraudadores se rían de ellos jugando a la petanca.
Por último, es curioso el trato preferente que se usa de manera arbitraria con la Ley General Tributaria. Está bien eso de hacerse pasar por tonto y movilizar a muchos políticos para evitar las sanciones por no cumplir correctamente como debemos hacer todos los ciudadanos. Enhorabuena a Montoro, que va a ser el primer ministro con dos amnistías fiscales en su haber en la misma legislatura.
En El Blog Salmón | Hacienda va a por las pensiones procedentes del extranjero