En Dubai hace tiempo que se está realizando un gran esfuerzo en convertirse en el gran núcleo del turismo de lujo del mundo. Hoteles de muchas estrellas, proyectos faraónicos en la costa, el edificio más alto del mundo… Una gran inversión para convertir a Dubai en un lugar dónde los ricos y famosos vayan a explorar de su tiempo de asueto, o incluso establezcan su residencia.
No obstante una noticia puede tambalear la posición de Dubai en el mundo. Una británica casada con un egipcio es sorprendida por su marido tomando el té con un amigo. La acusa de adúltera y tras un proceso judicial es condenada a tres meses de cárcel y a expulsarla de los Emiratos Árabes Unidos tras cumplir la sentencia. Lo que para nuestra visión occidental no tiene sentido, para ella ha pasado por una legislación especial que se aplica a los extranjeros. Marnie (que así se llama la señora) defiende su inocencia y se ha escondido con sus hijos ya que teme que su marido se los lleve mientras que está en la cárcel. Amnistía Internacional se ha pronunciado afirmando que si es encarcelada la considerará una prisionera de conciencia y reclamará su liberación inmediata.
Obviamente esto ha tenido bastante difusión. La noticia ha aparecido en la BBC y en The Times, no me quiero imaginar lo que estarán haciendo los tabloides británicos con el tema. Dubai va a adquirir una fama internacional de lugar en el que te meten en la cárcel por tomarte un té con un amigo. Obviamente esa no es la historia, pero esa es la imagen que dan. Con esa imagen no van a obtener el favor de los turistas occidentales. Además en tiempos de crisis tienen muchos lugares dónde elegir compitiendo por los pocos que tienen la capacidad económica de pasar sus vacaciones en el extranjero. Hay otros lugares, como Grecia, Croacia, El Caribe, el Lago di Como, Mónaco y La Côte d’Azur… Aparte están los lugares que también quieren parte de su tarta; en Montenegro intentan convertirse en referencia para el turismo de lujo, al igual que en Gibraltar. No faltan los lugares para elegir unas vacaciones con glamour.
En Dubai van a tener un enorme trabajo para cambiar la imagen que la gente se ha formado en poco tiempo. No creo que vayan a tener problemas para atraer árabes acaudalados, pero les va a costar atraer a occidentales. Se van a encontrar teniendo que decidir entre sus principios morales y el dinero de los turistas occidentales. ¿Qué acabarán escogiendo?