Con el boom inmobiliario los precios de la vivienda han estallado tras alcanzar niveles jamás vistos. Muchos se hipotecaron a estos ‘precios excesivos’ bien por necesidad o bien porque tenían la convicción de que seguirían subiendo en un futuro. Lo cierto es que el precio de la vivienda está cayendo desde que comenzó la crisis, aunque esta ‘rebaja’ no está siendo todo lo sustanciosa que se esperase.
Con esta situación encima de la mesa, la agencia de calificación Standard and Poor’s (S&P), ha estimado que el 8% de los hipotecados españoles, afrontan una deuda de mayor valor que el que posee la finca hipotecada en el mercado. Y además, dependiendo de la comunidad autónoma de la que se trate, muchos individuos han experimentado latentes pérdidas patrimoniales derivadas de este fenómeno.
Ignoro como se han obtenido estos resultados, pero partiendo de la base de que el ‘grueso de las hipotecas’ se firmaron en el trienio comprendido entre los años 2005 y 2007, justamente los años en los que los precios eran más altos, me parece escaso ese 8%. Dejando esta discusión a un lado, sería importante realizar un análisis de cuánto ha caído el precio de la vivienda desde que estallara la crisis hasta el momento actual, y realizar una proyección de cómo estaremos de aquí a un año o tres.
Si realizamos este ejercicio, y tenemos en cuenta lo que indican la amplia mayoría de los organimos estadísticos e instutuciones que se han pronuciado al respecto, deberíamos esperar que las viviendas en España experimentasen nuevas rebajas. Creo que la bajada media en el territorio nacional ha sido del orden de 20%, y ahora imaginen que fuera cierto que el ajuste no se hubiese producido de manera completa. ¿Qué pasaría con la gran mayoría de los que se hipotecaron en estos años de bonanza que ya han sufrido una pérdida del 20% y pueden perder otro 20% o incluso un 30%?
La respuesta es sencilla, pero muy complejas sus consecuencias. Actualmente existen muchos grupos de interés, interesados en que los peores augurios no se se materialicen, pero el querer o no que acontezcan ciertas cosas no depende sólo del empeño que se le ponga, sino de la viabilidad o no que ello tenga. Me explico, actualmente la banca, las grandes inmobiliarias e incluso el propio gobierno de la nación, son los más interesados en que esto suceda. Pero si con la crisis se sigue agudizando la situación social y macroeconómica, esto no tendrá mas remedio que ocurrir. Por todo ello, este 8% es solamente el pico del iceberg, pero debajo tenemos a la gran masa gris que cada vez es más de carne y hueso.
Vía | Cinco días
En El Blog Salmón | Vender una vivienda rápido: ajustar el precio
Imagen | tmgrupoinmobiliario