He aprovechado este mes de agosto para hacer turismo patrio, por mi ciudad natal, Jaén y la verdad que se me ha hecho el alma trizas. Muchas veces me he quejado de la situación económica de Andalucía y he hablado ya varias veces de las carencias que tiene esta provincia andaluza en muchos aspectos pero el turismo de “Jaén, paraiso interior” tiene errores graves pendientes de resolver.
El proyecto de impulso turístico de la ciudad lo lanza la Diputación a nivel provincial. Prueba de su política de expansión turística, podemos visitar su página web, en donde sólo tenemos una página de presentación con cinco fotos. El presupuesto anual de este proyecto anda por unos pocos millones de euros y creo que aras de mejorar la calidad turística de la provincia y capital jiennense se deberían evitar los siguientes errores:
Horarios de apertura de monumentos. Como por ejemplo el Centro de Interpretación del Castillo Santa Catalina. Cierra a las 21 horas en el mes de agosto. Si suponemos que hasta las 19 horas los 40ºC son la tónica general de temperatura, las tardes son inviables para estas visitas. Por ende, el coste del servicio de visita es muy elevado, 3,50 euros por visitante y no existe absolutamente un transporte público para llegar a dicho castillo que no sea un taxi.
Dejar hacer a los turístas fotos y vídeos. Es increible, como otra de las joyas de la ciudad, Baños Arabes y Palacio de Villadompardo, tiene terminantemente prohibido el uso de cámaras de vídeo o fotográficas. En mi visita, coincidí con un par de chinos bastante cabreados por este motivo, en donde no existe ninguna lógica que impida tomar imágenes si no se usa flash.
Por cierto, algunos hicimos caso omiso a esta prohibición y la imagen que ilustra el post es una foto de los Baños Arabes, tomada sin flash por supuesto. Me la ha regalado mi pareja, yo a esas fotos no llego ni después de 5.000 intentos.
La hostelería en Jaén en agosto cierra por vacaciones. Absolutamente todos los bares colindantes a las zonas monumentales, casco antiguo y restaurantes de calidad se encuentran cerrados. Los turistas no tienen un mísero bar en donde tapear o tomarse unas cañas en los alrededores del casco antiguo. Inadmisible desde luego.
Para potenciar un turismo culinario, se necesita que esos establecimientos es´tén abiertos. Jaén cuenta con excelentes restaurantes de cartas variadas. Si todos cierran en simultaneo, mal vamos desde luego.
Las administraciones deben trabajar de manera conjunta. No tiene sentido que una administración autonómica o provincial se gaste un dineral promocionando el turismo de una localidad si el propio ayuntamiento no cuida la limpieza de dichas zonas, servicios adicionales como puntos de información turística o favorece el transporte municipal entre las distintas zonas.
Muchas ciudades tienen un potencial turístico impresionante, a nivel monumental, cultural o gastronómico, dentro de todo el mapa de festejos y fiestas populares que se llevan en ellas. Descuidar este tipo de turismo es perder potencialidad de ingresos y tenemos que comenzar a trabajar más este segmento turístico, fuera del tópico de sol y playa. Una provincia como Jaén puede encontrar una importante fuente de ingresos en este sector siempre y cuando comience a trabajar en serio por el turismo de su capital y provincia.
Más Información | Web Jaén Paraiso Interior
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Imagen | Remo