Los mercados del Golfo Pérsico cayeron más de un 15 por ciento durante la semana pasada y la Bolsa de El Cairo se deslizó un 17% sólo en las últimas dos sesiones, demostrando que se viene un período de alta volatilidad para los mercados mundiales. El mercado petrolero fue el que tuvo un impacto más profundo al experimentar un alza de 4,35% el viernes y alcanzar los 100 dólares el barril.
Como señalé en diciembre, el petróleo iba encaminado a romper la marca de los 100 dólares el barril durante el primer trimestre, pero la crisis de Egipto aceleró el proceso. El temor de que el conflicto se extienda a otros países ha aumentado la volatilidad de los mercados. El Banco Central de Egipto envió un mensaje de calma señalando que tiene reservas por 36.000 millones de dólares para enfrentar una corrida contra la libra egipcia, que el viernes cayó a mínimos al cotizar a 0,12 euros la unidad. La tasa interbancaria trepó a 8,5% y comenzaron a subir las primas de riesgo de la deuda soberana egipcia, como muestra la gráfica, y de gran parte del mundo árabe.
La revuelta tiene una arista política y otra social. El 40% de la población gana menos de dos dólares diarios y es la que más sufre el impacto del aumento de los commodities, en particular, de los alimentos como el trigo, el maíz y la leche. Esto explica el temor que la rebelión contagie a otros países de la zona que también se enfrentan a la crisis alimentaria. Esta crisis viene del año 2007, pero la recesión la llevó al olvido. En cuatro años el mundo no ha sido capaz de resolver el tema de la crisis alimentaria, así como ha sido incapaz de resolver la crisis financiera, y la crisis del empleo. Pero ha gastado decenas de billones de dólares para mantener en pie a la banca.
Esta vez, la crisis toca una fibra neurálgica del mundo dado que por el Canal de Suez circulan más de 40 mil barcos al año, muchos de los cuales van cargados con petróleo para los países europeos. La preocupaciòn sobre una eventual interrupción en el flujo marítimo no es antojadiza si recordamos que el gobierno egipcio suprimió la internet y los servicios de telefonía celular con soprendente facilidad, marcando un hecho inédito que dejó al descubierto las vulnerabilidades de la red.
Un corte en la ruta del Canal de Suez, obligaría a hacer viajes más costosos por el sur de África, elevando fuertemente los precios. De ahí la prisa para exigir la rápida movilizacion del ejército, así como los sorpresivos movimientos de Israel que dejó pasar a las fuerzas egipcias por el norte del Sinaí, algo que estaba vetado desde el acuerdo de Camp David en 1978.
En El Blog Salmón | Problemas en Egipto llevan al petróleo a 100 dólares el barril, Recesión hace olvidar la crisis alimentaria