He leído un artículo en Expansión, según el cual parece que en esta época de crisis una posible salida es trabajar sin salario, y según apuntan en el artículo esto puede ser la tendencia del mercado laboral en el futuro. Leyendo el titular y el subtítulo me quedé helado, luego fui recuperando la temperatura al darme cuenta de que no somos pocos los que ya hacemos eso.
Mi conclusión es que sí que es posible trabajar sin un salario, pero lo que es imposible es trabajar sin cobrar. Me sorprende que en estos momentos de impagos por todas partes, ofrecerse a trabajar gratis pueda ser visto como una garantía de conseguir un empleo, aunque entiendo que pueda ser visto como una alternativa, sobre todo si se atiende a ciertos aspectos que trataré de fijar.
Premisas
Para que una relación laboral que se inicia ofreciendo sólo trabajo, sin salario, pueda llegar a buen puerto, y que no acabe siendo una forma de explotación hay que dejar muy claros ciertos puntos al inicio mismo de la relación, y estos puntos han de quedar reflejados en un contrato (preferiblemente por escrito).
Valoración objetiva
Se han de establecer unos criterios objetivos de valoración del trabajo a realizar, de tal forma que sea posible determinar si se cumplen o no, sin que haya lugar a dudas ni interpretaciones diferentes por ninguna de las partes. Fijar estos criterios es sin duda la parte más complicada en determinados tipos de trabajo en los que es difícil relacionar los resultados con el trabajo realizado; quizá esos trabajos no sean adecuados para aplicar este sistema.
Términos del contrato
Deben establecerse igualmente de forma clara en un contrato que es lo que se ofrece a cambio del trabajo sin salario, puede ser un puesto con salario, unos honorarios, una comisión sobre objetivos cumplidos o cualquier otra forma de retribución que se acuerde entre las partes.
Otro término importante del contrato es la duración del mismo, puede ser más o menos flexible, pero hasta esa flexibilidad debería quedar fijada de antemano. Y por supuesto debe estar claro que ambas partes aceptan el criterio de valoración que antes mencionaba.
Viabilidad del modelo
Si se atiende a las premisas anteriores el modelo puede ser perfectamente viable, y puede resultar en una buena forma de encontrar un empleo, pues queda poco lugar para el abuso y la explotación y tiene potenciales ventajas para ambas partes.
El empleador no corre tanto riesgo a la hora de contratar, si el empleado no cumple los objetivos fijados no cobra y ha trabajado gratis para nada. Esto haría que los empleados se esforzasen en cumplir los objetivos; de tal manera que las ventajas para el empleador son evidentes; tenemos una fórmula similar a un contrato en prácticas pero nos aseguramos de que el empleado va a rendir bien para lograr cumplir los objetivos.
Para el trabajador tiene sus ventajas, aunque no resulten tan evidentes como para el empleador, según el tipo de trabajo que ofrezca, puede incluso ofrecerlo a varios empleadores de forma simultánea, incrementando las posibilidades de conseguir un puesto, por supuesto solo los trabajos que no requieran presencia física en el puesto son válidos para esta forma de multiempleo. Además como el riesgo que asume el empleador es muy bajo, eso le dará más oportunidades para demostrar su valía y llegar a conseguir el trabajo.
¿Alguien trabaja así ya?
Los profesionales liberales, trabajamos en muchos casos sin cobrar un salario, y eso no es nada de otro mundo, pero siempre existe un contrato (o debería) en el que fijamos desde el inicio una contraprestación por nuestro trabajo. En ese contrato, yo como arquitecto me comprometo a hacer un determinado trabajo, por un determinado montante que me será pagado cuando entregue el trabajo (a menos que se establezca algún tipo de provisión inicial para hacer frente a los gastos, pero no suele ser habitual).De tal modo que yo hago el trabajo sin un salario, sin unos horarios específicos, todo lo más con un determinado plazo que puede ser más o menos flexible.
En El Blog Salmón | ¿Pueden las empresas bajar el sueldo a sus trabajadores?; ¿Cual es el salario justo?
Imagen | Fran Carreira