Tal y como os comenté en su momento, al hablar de la BIBE, Brigada de Investigación del Banco de España, tenía pendiente comentar con vosotros la lectura de 6 hombres marcados, de Marina Pino. Dicho y hecho, ya que aquí os dejo mis impresiones sobre esta obra que narra la creación, auge y caída de esa primer cuerpo policial dedicado a perseguir la falsificación de moneda, y que se vió profundamente afectado por los acontecimientos históricos que acontecieron (guerra civil y postguerra).
Para acabar con un buen sabor de boca vamos primero con aquello que, para mi gusto está menos logrado, aquellos aspectos donde mis expectativas no se han visto colmadas, pero que no impiden que recomiende el libro a todos aquellos que compartan el gusto por la Historia y por la Economía y las fianzas. Estos puntos más flojos son fundamentalmente dos:
- Por un lado, la obra tiene dos almas en pugna constantemente y donde se da un difícil equilibrio. Es más, diría que no se consigue. Por un lado el relato novelado de los hechos, con la idea introducir brío, vida en la narración de los hechos. Por otro las referencias historiográficas, documentales, que nos recuezan el trabajo de campo y de análisis de la autora. En ocasiones se desboca la primera, pero las más de las veces es la segunda la que que aplasta a aquella. No hay equilibrio, y el relato parece que avanza a trompicones.
- Por otro, apenas se profundiza en aspectos técnicos (que entiendo que quizás sólo interesan a frikis como yo): no se detallan casos como el de Rafael King, que la propia autora señala como la causa inmediata de creación de la Brigada, y mucho menos los otros en los que se pudieron involucrar o las técnicas de investigación, más allá de destacar lo ocupados que estaban. Por contra, pesa en exceso el relato político, las purgas republicanas y la depuración franquista. Necesario pero quizás más veto y previsible. A estas alturas ya conocemos la mezquindad de esas dos Españas.
Si obviamos estos dos detalles (o si desconocíamos el relato de la represión republicana y de la causa general franquista y por tanto salimos con algo nuevo de ello), podemos encontrar algunos episodios interesantes, mucho menos conocidos:
- En el libro se relata cómo se confiscó el oro privado por parte de ambos bandos, si bien el modo de hacerlo fue bastante distinto. En el caso republicano fue una venta forzada sí o sí, mientras que en el franquista, lo que comenzó resultando una donación, evolucionó posteriormente a a unos depósitos obligatorios que no quedaron liberados hasta los años 50. En zoomboomcrash podéis encontrar un buen resumen al respecto.
- Por otro lado, se narra la participación directa de estos agentes en los envíos del llamado oro de París. Se trata este de un episodio muy anterior en el tiempo al del famoso oro de Moscú (que también se comenta), nada más iniciarse la guerra civil, y donde algo chirría. ¿Si estos hombres eran tan dignos de confianza para una misión de ese calado a qué vino su caída en desgracia?, ¿fue cosa del caos republicano o un intento de borrar pistas?
Lo podríamos resumir en un estuvo bien, pero podía haber sido mucho mejor (de haber profundizado en aspectos más técnicos. Claro que, seguramente, eso puede alejar al lector medio, que no es precisamente un fan de lo económico) .
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