¡Alegría! Como decían hace tiempo en la revista El Jueves, "España va bien, y el extranjero ya ni te cuento". El último número de Cuadernos de Información Económica de la Fundación de Cajas de Ahorros publica un estudio según el cuál solo el 33% de los españoles ha podido ahorrar parte de su renta en los últimos doce meses. El mismo estudio, realizado en base a dos mil entrevistas, asegura que el 58% de los encuestados mantiene su nivel de vida al no poder ahorrar ni endeudarse, mientras que el 9% ha pedido algún prestamo.
El estudio demuestra algo que en un principio puede parecer un perogrullo, pero sobre lo que merece la pena reflexionar: en general, solo los ciudadanos con las rentas más altas pueden ahorrar parte de sus ingresos, mientras que sólo el 12% de los consumidores con ingresos calificados como "bajos" consigue hacerlo. Se aprecia además una imporante diferencia entre las personas entre 18 y 34 años, con un 45% de ahorradores, frente al segmento de los mayores de 55, en el que sólo ahorra un 21%. Con bastante probabilidad, los primeros estarán preparandose para el acceso a la inasequible vivienda, digo yo. Sobre todo teniendo en cuenta que el mismo artículo cita precisament este factor como la principal preocupación de...Los jóvenes entre 18 y 34 años. Sobre su percepción respecto a la evolución de la economía doméstica, encontramos sólo un 19% de españoles que consideran que han ido a mejor, frente a un 51% estable y un 30% que piensa que su situación económica se ha deteriorado. Lo que sí me ha hecho bastante gracia es que los responsables del estudio se sorprendan de que el 76% de los encuestados afirme que la inflación ha subido mucho, lo cual según ellos constrasta con la "baja" tasa interanual del 2,4% en Junio. Alguien tendría que explicarle a estos señores cómo se está calculando la inflación últimamente (incluir las rebajas, no incluir la vivienda...) y qué cosas se dejan fuera de dicho cálculo, lo cuál no deja de ser paradójico teniendo en cuanta que "estos señores" son las cajas de ahorro.
En cualquier caso, como decía al principio del artículo, creo que es necesario reflexionar sobre ese menesteroso 12% de ciudadanos de rentas bajas que sí consigue ahorrar. El ahorro es algo que habitualmente situamos al final de nuestras cuentas ("si queda algo, ya ahorraré"), mientras que quizás, y dado el cariz de los tiempos, sería necesario un cambio de filosofía y esforzarse en ahorrar primero y, posteriormente, ver cuánto puede uno gastarse. Ya se que esto es más facil de decir que de hacer, y al fin y al cabo es decisión de cada uno, pero ahí tenemos a ese 12% que demuestran que es posible.