El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo está considerando lanzar un proyecto de euro digital durante el año que viene, que empezaría con una fase de investigación dirigida al desarrollo de la moneda digital.
Esta decisión ha llegado después de analizar un cambio en las preferencias de los usuarios, al mismo tiempo que se prevé que los pagos se van a realizar de forma mucho más rápida y segura a través de una moneda digital.
El BCE mira hacia la DLT
La decisión del Banco Central Europeo (BCE) de meterse de lleno en el mundo de las monedas digitales y acuñar el Euro digital ha generado debate dentro de la industria del Distributed Ledger Technology (DLT).
Existe un gran temar por parte del Banco Central Europeo (BCE) que las iniciativas privadas de monedas digitales le estén disputando la soberanía monetaria está lanzando a que se tiren a la piscina.
Si el Banco Central Europeo (BCE) quiere moneda digital entonces los bancos tradicionales tendrán que adaptarse a los nuevos condicionantes de una nueva digital, a parte de las consecuencias que puede tener para los usuarios tener un Euro con cifrado de moneda única.
El BCE pone en peligro a los intermediarios del flujo dinerario
Una de las premisas para utilizar las monedas digitales como el Bitcoin es la desaparición de los intermediarios. Si el Banco Central Europeo (BCE) asegura la distribución más eficaz del dinero, sobre todo de sus estímulos, es decir, que sea más accesible y ofrecer créditos, el papel de las entidades bancarias perderá mucho valor.
Por tanto, todos los actores que participan actualmente el flujo monetario pueden perder el valor añadido que tienen en el proceso, ya que las entidades bancarias han creado muchas ineficiencias y los cambios les han obligado a plantearse sus modelos de negocio.
Muchas entidades bancarias tienen que claro que tienen que evolucionar y se están implicando en proceso de creación de las monedas digitales de los bancos centrales, y España es un claro ejemplo, ya que quiere tener un trozo de pastel de las monedas digitales.
¿Tiene sentido una tarjeta de crédito con las monedas digitales?
Existen otras entidades que pueden estar en peligro con la implantación del Euro digital que actualmente están ofreciendo métodos de pagos tradicionales, como es el caso de las tarjetas de debito o crédito, ya que en el futuro se utilizarán otros mecanismos para hacer las transacciones como es el caso de los monederos digitales.
Por otra parte, las monedas digitales de los bancos centrales pueden acabar por reemplazar el efectivo si los Gobiernos puede hacer una rastreo de dónde va el dinero, ya que en las actuales monedas digitales no saben que pasa con el dinero.
Un estricto control puede no beneficiar a las nuevas monedas digitales de los bancos centrales, ya que vulnera a la privacidad de los usuarios, aunque si que sería necesaria una mínima de regulación.
Existe para el BCE dos tipos de usuarios para el Euro digital
Una hipotética desaparición del dinero es cada vez más cercana para el Banco Central Europeo (BCE), y ya se está planteado que la euro zona tenga una versión tokenizada del euro basada en tecnología Blockchain o en algún otro DLT.
Esta moneda digital va a ser igual que el dinero que estamos utilizando ahora y para el usuario sólo cambiaría el soporte en que se realizar las transacciones. Claramente los ciudadanos europeos lo podrían utilizar de manera digital en sus pagos diarios independientemente el importe que sea.
Es decir, el euro digital tendría dos conceptos, uno de gran volumen, el que ya está funcionando entre el Banco Central Europeo (BCE) y las entidades bancarios, uno de pequeño volumen, que se está utilizando entre los ciudadanos en sus compras.
En el caso de la utilización del Euro digital por parte de los ciudadanos se tiene que tener presente que tendrían que tener un determinado patrimonio en moneda digital, es decir, igual que cuando sacamos dinero por el cajero de una entidad bancaria.
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