Hoy ha salido publicado en el BOE el Plan Antifraude para 2014 y como novedad más importante destacan los ejes de actuación que ha marcado la AEAT para el control de la economía sumergida vigilando la actividad en internet.
Hacienda quiere focalizar las actividades en la red, tanto las que operan de manera simultánea como aquellas cuya base exclusiva de intercambio de bienes y servicios en internet. Tal y como enumera el plan antifraude, se van a mirar las siguientes actividades:
- Captación y explotación de la información disponible en Internet que permita descubrir actividades ocultas.
- Actuaciones de control sobre las personas físicas o entidades titulares de páginas web receptoras de publicidad para asegurar la adecuada tributación de los ingresos por publicidad en España.
- Actuaciones de control sobre aquellos fabricantes o prestadores de servicios que comercialicen sus bienes o servicios a través de Internet para garantizar la adecuada tributación en España de las rentas generadas en la actividad económica.
El primer punto está claro que se refiere a todos los puntos de publicidad que puede tener una hipotética actividad de negocio, que van desde la página web tradicional a la presencia en foros, redes sociales o contratación de campañas publicitarias con terceros.
Respecto a las páginas webs receptoras de publicidad, Hacienda vuelve a comenzar la casa por el tejado, dado que la inmensa mayoría de actividades económicas que tienen un volumen sustancial de ingresos, ya declaran estos ingresos por la propia bancarización que tiene internet. Ahora bien, si lo que pretenden es sancionar al blog o web que ingresa la desorbitada cifra de 50 ó 100 euros mes, quizá deberían comenzar por impulsar un cambio legislativo para facilitar la tributación de estos ingresos a los titulares de las webs.
Respecto a la deslocalización de rentas de la actividad económica, permítanme unas risas y seguimos comentando. Ya veo a los inspectores de la AEAT mirando a Google, Amazon, Apple, Microsoft y resto de grandes operadores de la red, para ver dónde tienen que tributar las ventas, dónde están los costes de transferencia y cuáles son los objetivos a corto plazo.
Ya el pasado año, se anunció una focalización específica de los negocios de la red y Hacienda no ha realizado apenas actuaciones en este segmento. Ya se encarga el propio Gobierno de matar a las empresas de la red que sí funcionan y tributan en España de complicarles la vida lo suficiente para que planteen cerrar en España o deslocalizarse sin tener problemas en los impuestos.
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