Ayer vimos a la Secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, visitando a Grecia y felicitando a su gobierno por las medidas que han anunciado y aprobado en su parlamento. Como ahora falta su implementación y como las promesas del gobierno griego no siempre han resultado en acción, la Señora Clinton llegó para animar y para presionar al gobierno griego para que cumplan.
Desde que estallaron sus problemas financieros y desde que ha recibido promesas de ayuda de sus socios europeos, el gobierno griego ha sido más fuerte en las promesas pero mucho menos consecuente en la aplicación de las promesas. Las diez medidas más llamativas del programa prometido por el gobierno griego son los siguientes:
- Ingresos provenientes de impuestos subirán, con aumentos en algunos impuestos inmobiliarios y la subida de la IVA de 19% al 23%.
- Impuestos se aumentarán para productos de lujo, como los yates, piscinas y autonóviiles, con impuestos especiales para empresas generando beneficios y personas con altos sueldos.
- Se aumentarán impuestos un tercio sobre los combustibles, los cigarrillos y el alcohol.
- Los sueldos en el sector público se reducirán un 15%.
- Los gastos para la defensa se reducirán 200 millones de euros en 2012 y 333 millones de euros al año del 2013 al 2015.
- Los gastos de educación se reducirán, incluyendo la fusión de 1976 escuelas.
- Los gastos de la Seguridad Social se reducirán 1.090 millones de euros en 2011 bajando a 700 millones de euros en 2015, con un total de 5.110 millones de euros durante este periodo.
- El gobierno privatizará varias empresas estatales con ingresos proyectados de muchos miles de millones para las arcas.
- Sólo un 10% de los funcionarios que se retiran este año se reemplazarán y el 20% en los próximos años.
- Los gastos de salud se reducirán 310 millones de euros este año y 1.810 millones de euros al año del 2012 al 2015.
Estas medidas impactarán de forma importante el presupuesto del gobierno griego y la introducción de todas estas medidas impactarán de forma importante a los que menos pueden hacer frente a los impactos que resultarán.
Grecia ha entrado en sus líos a lo largo de malas políticas económicas durante décadas, exigir que resuelvan sus problemas en un par de años, dañará a los más desprotegidos. Como ya he dicho en estas páginas:
Para dar a Grecia el tiempo que necesitan, ellos y sus acreedores se deben sentar y llegar a un acuerdo de pago que implicaría el alargamiento de los pagos, por parte de los acreedores, y medidas económicas creíbles, por parte de Grecia. Siguiendo un proceso controlado, medido y respaldado por Europa y por el Fondo Monetario Internacional (FMI), no tiene por qué contaminar el resto de los países y sus relaciones con sus acreedores.
No es aceptable proteger a los bancos sobre las espaldas de los griegos más necesitados y deben darles mucho más que un puñado de años para resolver sus problemas. Por lo que veo, la señora Clinton ha llegado con exhortaciones pero sin ayudas.
Vía | CNBC (en inglés)
En El Blog Salmón | El déficit de Grecia no cumple las previsiones: el plan no funciona
Imagen | Alun Sal