El Instituto Nacional de Estadística (INE) acaba de publicar el Índice de Precios al Consumo (IPC) adelantado correspondiente al mes de enero de 2017. Según este la inflación se dispara hasta el 3% en el primer mes del año, más de un punto por encima de la registrada en diciembre. Los valores del IPC publicados hoy están a niveles de octubre de 2012, cuando la subida fue del 3,5%. Os lo dijimos: la inflación ya está aquí.
Este indicador proporciona un avance del IPC que, en caso de confirmarse, supondría un aumento bastante significativo: de 1,4 puntos en su tasa anual, ya que en el mes de diciembre esta variación fue del 1,6%.
Los precios se han desbocado a comienzos del año debido sobre todo a la fuerte subida de los precios de la electricidad, que este mes se han disparado. El encarecimiento de los carburantes (gasoil y gasolina), también ha influido considerablemente en la subida de precios, según el INE.
Desde el INE señalan que la fuerte subida de este indicador se justifica en la "subida de los precios de la electricidad y los carburantes frente a la bajada que experimentaron el año pasado". Vamos, que no sólo es que hayan subido de precio este año, sino que el año pasado por estas mismas fechas los precios de los mismos caían. En concreto, la luz caía un 13% en enero de 2016, mientras que los combustibles lo hacían alrededor del 20%.
Con todo, habrá que esperar a mediados de febrero a que el INE publique el IPC final de enero para conocer en qué porcentaje exacto electricidad y combustible han contribuido a que los precios se disparen, ya que con el dato adelantado de hoy no se especifica el incremento de cada una de las rúbricas que componen el indicador.
Por su parte, el indicador adelantado del IPCA, que es el que se elabora para poder hacer comparaciones con el resto de países de la UE, experimentó una variación anual en enero en el 3%. Si este dato se confirma, la tasa anual del IPCA aumentaría más de un punto y medio respecto al mes anterior.
La economía española pierde competitividad
Suponemos que los grandes defensores de la inflación como motor del crecimiento económico están de enhorabuena con la información publicada hoy por el INE. Nosotros pensamos todo lo contrario: los precios se han desbocado más de lo previsto y la inflación española ya se sitúa por encima del objetivo del 2% del BCE y también por encima de la europea (1,8%), por lo que la perdida de competitividad de nuestra economía es un hecho, sobre todo vía exportaciones. Además, si el incremento de precios se traslada a los salarios esta pérdida de competitividad sería aún mayor.
Tan grave es la situación que el ministro de Economía, Luis De Guindos, ha alertado en una reciente declaración ante la prensa de una posible subida de tipos por parte del BCE. Además, ha señalado que ya se ultima el Decreto de Desindexación del IPC, con el objetivo de que el repunte de la inflación no dañe la competitividad de la economía española. Llevamos oyendo hablar de esta desindexación desde que De Guindos llegó al ministerio pero ahora más que nunca se convierte en un tema de máxima prioridad para evitar que la economía española pierda competitiva.
Asalariados, pensionistas y funcionarios los principales perjudicados
Son ya diez meses consecutivos de aumentos de precios en España, desde abril del año pasado; y cinco meses seguidos en valores positivos: 0,2% en Septiembre, 0,7% en Octubre, 0,7% en Noviembre, 1,6% en Diciembre y 3% en enero. Además de que nuestra economía pierde competitividad, asalariados, pensionistas y funcionarios son algunos de los grupos perjudicados por la inflación. Las consecuencias de esta no se quedan sólo ahí, sino que también provoca malestar social por la pérdida de poder adquisitivo.
Además de esto, la inflación se traduce en:
- Perjuicios para los prestamistas.
- Riesgo de sustitución de mano de obra por capital.
- Pérdida de confianza en la economía.
- Las personas con rentas más bajas son las más perjudicadas por las subidas de precios
- Puede ocasionar inflación autonstruida, es decir, las expectativas futuras hace que los agentes trasladen el aumento de precios hacia delante en el tiempo y ello provoque aún más inflación.
¿En serio queremos esto? Nosotros ya lo hemos repetido por pasiva y por activa: la inflación es mala para la economía.
Cambio de base del IPC
Según informa el INE, el próximo día 15 de febrero se publicará el primer Índice de Precios de Consumo en base 2016. Con la implantación de la nueva base se pretende mejorar la representatividad de este indicador mediante cambios en la composición de la cesta de la compra y la actualización de la estructura de ponderaciones.
Como ya sabrán, las críticas al cálculo del IPC siempre han estado presentes, debido sobre todo a que la denominada cesta de la compra está compuesta por productos fijos y no tiene en cuenta que los consumidores cambian de productos cuando sus precios suben demasiado.
Por otra parte, tampoco incorpora los nuevos bienes que van apareciendo en el consumo de las familias hasta que se hace una actualización de la cesta de la compra, lo cual solo ocurre cada cierto número de años. Además, tampoco recoge los cambios en las calidades de los productos que se producen ni la economía sumergida.
Imagen | FutUndBeidl
En El Blog Salmón | La inflación ya está aquí, una mala noticia