Crisis por aquí, crisis por allá... y sin embargo, el dinero parece que no deja de fluir. "Dinero no habrá, pero p'a tontás...". El caso es que según un estudio de la consultora DBK, los hoteles de lujo en España incrementarán su facturación más de un 10% en 2007. Y es que parece que es un sector en auge: de los 194 hoteles de cinco estrellas que había en España a finales de 2004 se ha pasado a 250 en verano de 2007. Y la tendencia parece que es creciente: las previsiones apuntan a que el parque de hoteles de estas características estará en torno a los 350 dentro de un par de años. Ahora son más de 40.000 habitaciones "de lujo" las que están disponibles, principalmente en Andalucía y Canarias (parece que el clima es un más que notable atractivo para este tipo de establecimientos), comunidades en las que además se detecta el mayor ritmo de crecimiento en nuevas aperturas.
Las tendencias en el sector apuntan a hoteles cada vez más pequeños, enclavados en edificios emblemáticos restaurados (casonas, palacetes, etc.) y con una creciente oferta de servicios complementarios de ocio, deporte, salud, belleza, relax, restauración, enología... orientada a generar una mayor diferenciación y sentido de exclusividad.
¿Resultado? Un crecimiento sostenido en los últimos años de un 12% en el sector (hasta alcanzar los 1.350 millones de euros en 2006) y expectativas de que tanto para este 2007 como para los años sucesivos se mantendrá un crecimiento por encima del 10%. No está mal para una economía en crisis en un sector, además, tan potencialmente sensible a las veleidades de la coyuntura. Pero es que desengañemonos, los ricos crisis, lo que se dice crisis, tampoco llegan a tener...