Hace unos días Martin Varsavsky comenzó un debate sobre la progresividad de los impuestos en España, y al tema ha dedicado unas cuantas entradas. Y el tema la verdad es que es bastante interesante porque muchos españoles desconocen algunos datos muy importantes.
Si preguntas a cualquiera sobre la progresividad de los impuestos seguro que dicen: sí, son progresivos, hay tramos (aunque a veces no entiendan bien como funcionan los tramos). Mucha gente piensa que si ganas más, pagas más porcentaje de impuestos, lo que crea progresividad. Y están en lo cierto, al menos respecto al IRPF. El problema se encuentra en los gastos sociales.
La cotización a la Seguridad Social no es progresiva. Existe un tipo único. El trabajador puede pensar que es poco, ya que en su nómina ve que es alrededor de un 6%, lo cual no influye mucho en la progresividad. Pero es que aparte de dicha cantidad, las empresas paga un 30% del salario bruto a la Seguridad Social. Es decir, si tu tienes un sueldo bruto de 20.000 euros, realmente tu empresa está gastándose 26.000 euros. Es más, el tema es aún más complicado, ya que aproximadamente a partir de los 36.000 euros brutos al año ya no se paga más de Seguridad Social.
La consecuencia práctica de todo esto, es que si consideramos las cuotas a la Seguridad Social un impuesto más, al igual que el IRPF, el trabajador prácticamente paga el 50% en impuestos. Hay una tabla muy descriptiva que ha colgado Martin. Si cobras 1250 euros netos al mes, la empresa se está gastando 2500 euros en ti, pero si cobras 15.000 euros netos al mes, la empresa se gasta 30.000 euros en ti. Esto no es progresivo.
Y el problema es que la Seguridad Social no es progresiva. El tipo es único. Y además existe un mínimo, lo cual es claramente desalentador para el que quiere ser autónomo, ya que aunque no tengas ingresos porque estés empezando una actividad, tienes que pagar una cuota mínima a la Seguridad Social que además apenas te da prestaciones.
¿No sería ya época para plantear que la Seguridad Social también sea progresiva? Sobretodo en el sentido de liberar a los que menos cobran. En mi opinión deberían seguir recibiendo los mismos servicios sin necesidad de que el Estado se quede con el 50% de lo que la empresa paga por él.
Vía | Martin Varsavsky