Ayer murió Gabriel García Márquez, premio nobel de Literatura en 1982 y uno de los más grandes autores hispanos de la historia (y quizá también universal). Sus novelas, como todas las que tratan las reacciones humanas a los acontecimientos, tratan sobre economía, y desde aquí quiero hacerle un pequeño homenaje.
Gabo, como le gustaba que le llamaran, empezó como periodista y su primera novela tiene una historia curiosa. Se publicó como fascículos en el periódico "El Espectador" de Bogotá en 1955. Esta publicación le hizo exiliarse de Colombia ya que generó mucha polémica y aunque no se publicó como libro hasta mucho después (1970) creo que sería injusto no respetar la fecha original de publicación.
¿De qué novela estoy hablando? De Relato de un naufrago. Es una historia real, de ahí la polémica. Versa sobre la inverosímil historia de la supervivencia de Luis Alejandro Velasco, tripulante del buque militar A.R.C. Caldas, tras caer al mar y estar allí durante 10 días sin comida ni agua.
La versión oficial es que una tormenta le arrojó por la borda. La novela, en cambio, señala que el problema fue que la cubierta estaba llena de contrabando (el buque venía de repararse de EEUU) y se soltó, arrastrando al marinero por la borda.
En el plano personal tengo mucho cariño a esta novela. Fue la primera que leí de Gabo; el relato de 10 días en el mar no se hizo nada pesado, a pesar de lo monótono de la historia; y odio en general las novelas marítimas, pero esta me atrajo bastante. Pero vamos a valorarla económicamente.
Primero, esta novela indica cómo la corrupción puede acarrear graves problemas a la vida de mucha gente. En este caso fue una única persona, pero podría haberse hundido el buque. Segundo, también deja entrever (siento el spoiler) que el Gobierno no rescató a Alejandro aún pudiendo, ya que temían (con razón) que se descubriera la verdad. Es decir, los Estados ponen precio a la vida de las personas y esto no es aceptable cuando hay corrupción, pues los incentivos son perversos.
Y tercero, una prensa independiente es fundamental para combatir la corrupción y lograr que los Estados no sean disfuncionales. Esta prensa seguramente se lleve mal con el poder y eso es bueno. En la actualidad hago otra lectura: los medios de nueva generación, sin estrechos vínculos con el poder, son los que más libertad tienen. La prensa tradicional está ahogada de deuda y bajos ingresos, y no está cumpliendo con esta función.
Este ha sido mi pequeño homenaje a un gran escritor. Sé que muchos piensan en otras novelas cuando hablan de Gabo, y lo comparto: Cien años de soledad es una de las mejores novelas que he leído y creo que es imprescindible. Pero a veces hay que salirse de los libros tradicionales de un autor para comprender mejor su contexto.
Imagen | Алый Король