Cuando se cumplen 60 años de la firma de los acuerdos para la creación de la Unión Europea, la economía de los países miembros de la Unión Europea comienza lentamente a salir de la crisis.
El mayor logro de este proceso ha sido la unión económica y monetaria (UEM). Este ha sido uno de los objetivos más ambiciosos de la Unión Europea el cual se ha ido implementado de forma periódica en varias fases.
Este proceso de integración ha establecido una moneda común en los países miembros, el euro, y ha implantado mecanismos para coordinar las políticas económicas y presupuestarias, al tiempo que ha constituido un sistema para gobernar económicamente.
Es gobernabilidad se ha basado en un política monetaria única y una política de cambio compartida por el Consejo y el Banco Central Europeo.
Nos podemos preguntar: ¿Cómo ha sido la evolución económica que ha sufrido la Unión Europea en estos 60 años?
Inexistencia de acción monetaria europea (1945 -1969)
La Unión Europea nació con el anhelo de acabar con los frecuentes y cruentos conflictos entre vecinos que habían culminado en la Segunda Guerra Mundial. En los años 50, la Comunidad Europea del Carbón y del Acero es el primer paso de una unión económica y política de los países europeos para lograr una paz duradera.
Sus 6 países fundadores fueron Alemania, Bélgica, Francia, Italia, Luxemburgo y los Países Bajos. Ese período se caracteriza por la guerra fría entre el este y el oeste. Las protestas contra el régimen comunista en Hungría son aplastadas por los tanques soviéticos en 1956.
La Unión Europea ha llevado a cabo, a lo largo de su historia, varios intentos de potenciar la cooperación económica entre los países que la componen. Siendo la unión económica y monetaria una aspiración desde finales de los años 70.
Se puede diferenciar varias etapas. La primera etapa corresponde al periodo de los años 1957 al 1969, caracterizado por la inexistencia de una acción monetaria a nivel europeo, ya que el acuerdo (Tratado de Roma) tan sólo tenía previsto un pocas disposiciones en materia de cooperación económica, por el que se constituye la Comunidad Económica Europea (CEE) o "mercado común".
En esta etapa es cuando surge el propósito de crear una moneda común, aunque el sistema monetario internacional no lo pidiera, durante este período, los 6 miembros fundadores participaban en el sistema monetario internacional de Bretton Woods, el cual funciona con un régimen de paridades fijas estables.
Memorándum sobre “La Coordinación de la Política Económica y de la Política Monetaria en la Comunidad” (1969)
Bajo la perspectiva de las tensiones que empezaban a surgir en el sistema monetario internacional, la Comisión Europea presentó al Consejo, a principios del 1969, el memorándum sobre “La Coordinación de la Política Económica y de la Política Monetaria en la Comunidad”, conocido como Plan Barre.
El plan consistía en lograr una convergencia y compatibilidad de los objetivos económicos de la países miembros, la coordinación de sus políticas económicas y la cooperación monetaria a nivel de los países miembros.
Se propusieron una serie de medidas en las que se encontraba la coordinación de los planes económicos a medio plazo, establecer facilidades de crédito a corto plazo de carácter inmediato e incondicional para aquellos que tuviera dificultades en su balanza de pagos y establecer facilidades de crédito a medio plazo de carácter condicional para las dificultades persistentes en la balanza de pagos.
Informe Werner (1970)
El informe Werner proponía alcanzar el objetivo final de una integración completa en un horizonte de 10 años a través de un proceso que constaba de 3 etapas:
Primera etapa, concluiría en 1973, se proponía limitar las fluctuaciones de tipo de cambio de las monedas de los estados miembros, ampliar las facilidades de crédito a corto y medio plazo y alcanzar una mayor cooperación entre las políticas económicas de los países miembros.
En las siguientes etapas, los tipos de cambio quedarían fijados de forma irrevocable t se llevaría a cabo la unificación progresiva de los mercados de capitales hasta llegar a la completa liberalización de los movimientos de capitales, para así crear al final un banco central común.
Por la gran inestabilidad monetaria causada por la crisis del petróleo el proyecto del informe Werner que debería haber comenzado en el año 1980 no se puso en marcha.
Sistema Monetario Europeo (1979)
Los países miembros para contrarrestar la inestabilidad y la volatilidad de los tipos de cambio decidieron crear el Sistema Monetario Europeo (SME) con la participación de todos los países miembros de la Comunidad Económica Europea (CEE), salvo el Reino Unido.
Con la creación del Sistema Monetario Europeo comienza a principio de 1979 una nueva etapa de la integración económica en Europa.
El Sistema Monetario Europeo se creo a través del acuerdo de los bancos centrales de los países miembros de la Comunidad Europea, con la finalidad de administrar los tipos de cambios nominales intracomunitarios y financiar las intervenciones de los mercados de divisas.
Su principal objetivo era instaurar una zona de estabilidad monetaria reduciendo las fluctuaciones entre las monedas de los países participantes. Es decir, un sistema de tipos de cambio fijos pero ajustables, donde los tipos de cambio se delimitaban con unas bandas de fluctuación para los tipos de cambio nominales.
El Sistema Monetario Europea establecía unas parrillas de paridades bilaterales entre todas las monedas participantes y también unas paridades de cada una de las monedas participantes con respecto al ECU (cesta compuesta por una cierta cantidad de cada moneda de los 15 países que formaban la Unión Europea).
Empieza el desarrollo institucional de la Unión Económica Europea (1988)
En 1988 empezó el desarrollo institucional de la Unión Europeo Monetaria (UEM). En el Consejo Europeo de Hannover se concreto adoptar el Acta Única, los Estados miembros confirmaron el objetivo de realización progresiva de la unión económica y monetaria.
El comité de Delors se presentó un informe, en abril de 1989, en que se preveía la creación de un Sistema Europeo de Bancos Centrales y una moneda única, a la vez que se contemplaba la transición a la Unión Económica Monetaria como un proceso compuesto por 3 fases:
La primera fase, entre junio 1990 y enero 1992, consistía en reforzar la cooperación entre los bancos centrales.
La segunda fase sería la creación de un Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC), así como la transferencia progresiva del poder de decisión en materia de política monetaria.
La última fase se fijaría de forma irrevocable las partidas de las monedas nacionales y éstas se sustituirían por la moneda única europea.
Tratado de Maastricht (1992): Marco jurídico de la Unión Económica y Monetaria
En el Tratado de Maastricht se estableció el marco jurídico de la Unión Económica y monetaria donde se estableció el calendario básico de sus principales etapas y fijando los criterios de convergencia para los países miembros.
Las diferentes fases eran:
Primera fase, iniciada en julio 1990, consistía en la libre circulación de capitales en la Unión Europea (supresión de los controles de cambio), aumento de los recursos destinados a eliminar las desigualdades entre las regiones de los países miembros ( Fondos Estructurales ) y la convergencia económica, mediante la vigilancia multilateral de las políticas económicas de los países miembros.
Segunda fase, empezó en enero de 1994, establecía la creación del Instituto Monetario Europeo (IME). Realizaría los trabajos preparatorios necesarios para la constitución del Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC), para la dirección de la política monetaria única y para la creación de una moneda única en la tercera fase.
A finales de 1995, el Consejo Europeo decidió que una unidad monetaria europea, que se introdujera en la tercera fase que comenzaría a principio del año 1999, se llamaría 'Euro' y se indicó el orden cronológico de los acontecimientos que marcarían el proceso de transición al euro.
Se pretendía lograr la independencia de los bancos centrales nacionales y la adopción de las normas destinadas a reducir los déficits presupuestarios. En Consejo Europeo adoptó, a mediados de 1997, el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que cuya finalidad es garantizar la disciplina presupuestaria.
- Tercera fase, a principio de 1999, y última fase de la Unión Económica Monetaria con la fijación de los tipos de cambio de las monedas de los 11 países miembros participantes desde el principio de la Unión Europea y el inicio de la ejecución de la política monetaria única bajo la responsabilidad del Banco Central Europeo (BCE).
Aquellos que formaban parte de la Unión Europea y querían adoptar el euro debían cumplir previamente los criterios de convergencia establecidos por el Trata de Maastricht.
Expansión y una época delicada (2000 – Hoy en día)
El euro es la nueva moneda de muchos de los países miembros de Unión Europea. Cada vez más países adoptan en Euro como moneda de intercambio. A finales del 2001 empieza una estrecha colaboración contra la delincuencia y la preocupación terrorismo surgido por los atentadas del 11 de septiembre de la Torres Gemelas en Nueva York.
A partir del año 2004, se zanjan de forma definitiva las divisiones políticas entre la Europa del este y la Europa del oeste por lo incorporación de estos países a la Unión Europeo. En 2008 empieza la crisis financiera que sacude los cimientos de la economía mundial y, sobre todo, las políticas que se estaban aplicando hasta entonces.
El Tratado de Lisboa entra en vigor en 2009, que aporta una modernización de la instituciones europeas y métodos de trabajos más eficientes la Unión Europea.
A partir del 2010, la crisis económica mundial golpea a los países de Europa donde se debe ayudar económicamente a varios países para hacer frente a sus dificultades y se establece la 'Unión bancaria' para crear un sector bancario mucho más seguro y mucho más fiable.
A partir del 2014, la entrada masiva de euroescépticos en el Parlamento Europeo, la nueva situación política en la península en Crimea por la anexión a Rusia y un aumento del extremismo religioso en Oriente medio y la éxodo de refugiados Sirios a Europa, da lugar a políticas mucho más restrictivas y a plantearse algunos de los miembros si quieren seguir todavía en la Unión Europea ( Brexit ).
En el 2016, Mario Draghi, Presidente del Banco Central Europeo, estimula a los mercados bajando los tipos de interés de referencia al 0 por ciento, además de la compra de deuda corporativa a través de la emisión del programa TRLO para prestar dinero a las entidades bancarias.
En El Blog Salmón | ¿Está Europa en peligro?