En pleno clima de inestabilidad e incertidumbre para la sanidad privada, y debatiéndose la situación actual de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface), las aseguradoras exigen una mejora de las condiciones para abarcar los costes de cada prima. De ahí que se estime que los precios de las coberturas se incrementarán entre un 10-15% en 2025.
El gasto medio por persona en servicios de salud no reembolsables fue de 499 euros en 2023, un 45% más que hace una década, que era de 343 euros. Ese gasto en sanidad privada se asocia a servicios que no son financiados por el Estado. Hablamos de odontología, óptica, copagos farmacéuticos o acceso a sanidad privada (sin incluir los seguros privados de salud, que registraron una media de 178 euros por persona en 2023).
En solo una década, el gasto per cápita en sanidad privada ha evolucionado del siguiente modo: 2013 (342 euros), 2014 (379 euros) 2015 (388 euros), 2016 (387 euros), 2017 (393 euros), 2018 (406 euros), 2019 (420 euros), 2020 (402 euros), 2021 (484 euros) 2022 (497 euros) y 2023 (499 euros). En una década, el gasto de bolsillo se ha disparado en 156 euros más (45%).
¿Cómo será la nueva subida?
Esta subida, considerada como la mayor de la última década, vendría a suponer una continuación de la tendencia hasta la fecha. Y es que la póliza de salud se ha revalorizado un 50%, con crecimiento medio de las tarifas entre el 4% y el 7%. Se trata de un ritmo mucho menor de lo que se espera en el próximo ejercicio.
Por tanto, los casi 13 millones de personas que cuentan con un seguro de salud privado pagarán mucho más. Mientras en 2015 abonaban una media de 650 euros anuales, ahora pasarán a pagar unos 1.100 euros en 2025, teniendo en cuenta que actualmente abonan 950 euros.
El incremento de precios en la sanidad privada va asociado a unas causas esenciales: aumento de costes, demanda de servicios, siniestralidad por póliza, edad de las personas aseguradas, inflación y efectos post-covid (como aumento de los costes por pruebas, tratamientos y hospitalización).
Situación histórica
Es tal la subida que se asocia al seguro de salud privado, que las primas podrían llegar a superar, con creces, al seguro de automóviles, hasta la fecha de los más elevados.
Se espera que la limitación del sector de la sanidad privada en España llegará cuando se alcance al 30% de la población cubierta. Actualmente ya existe un 29% de la población con una alternativa privada al Sistema Nacional de Salud (SNS).
Es una situación histórica, pero para nada novedosa. En los últimos años, el seguro de salud ha repuntado en el ámbito colectivo o empresarial. Y es que ocho de cada diez compañías ofertan este producto a sus asalariados, aunque ni la mitad ofrecen este tipo de planes financiados. Una cifra que, pese a su impacto, demuestra que sigue una escala descendente desde 2018.
La sanidad privada en Europa
La facturación del sector sanitario privado aumentó un 11,5% entre 2019 y 2021. España se convirtió en el quinto país de la UE que más dinero mueve, con 37.289 millones de euros en 2021.
Solo le superan Alemania (67.772 millones de euros), Reino Unido (56.126 millones de euros), Francia (46.766 millones de euros) e Italia (41.166 millones de euros).
Además, el gasto medio de los españoles en asistencia sanitaria privada fue de 788 euros anuales por habitantes. El sector logra aportar un 3,1% al PIB español. En la relación entre sanidad privada y porcentaje que se aporta al PIB, España lidera el ranking de los países de la UE.
En términos globales, Estados Unidos aparece a la cabeza de los países con la sanidad más cara. En condiciones extremas de asistencia, el viajero puede desembolsar hasta 69.654 euros de media, aunque los costes hospitalarios dependen del hospital.
España es el tercer país de la OCDE que más gasta en la sanidad privada, sin alcanzar el promedio (8,7%) en inversión para la pública. Precisamente, el informe del Observatorio de la Sanidad Privada 2024 de la Fundación IDIS refleja que la financiación privada representa un 3,1% del PIB nacional (36.805 millones de euros), solo por detrás de Portugal (4,1%) y de Suiza (3,6%).
La ayuda de 300 euros para los funcionarios de Muface
Todos los funcionarios adscritos a Muface tienen la oportunidad de conseguir una ayuda de 300 euros. Estas ayudas se otorgan en forma de becas de estudio, con plazo máximo de hasta el 31 de octubre para recurrir a ella. Así queda recogido en la Resolución de 8 de mayo de 2024 de la Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado
La beca, de pago único, puede ser solicitada por los mutualistas titulares en alta o situación asimilada el 15 de octubre de 2023 y que mantuviesen la condición en la fecha de presentación de la solicitud